jueves, 29 de diciembre de 2011

A diez años de la Masacre de Floresta


Ese triple crimen de un diciembre enloquecido

Vía Página/12

Con una marcha convocada en el lugar del hecho, con la actuación de murgas y un recital de rock, serán recordados hoy Maximiliano Tasca, Cristian Gómez y Adrián Matassa, a diez años de su asesinato, que fue un coletazo de la tensión social desatada a partir del 19 y 20 de diciembre de 2001 y de la violenta represión policial (ver nota aparte). Por el triple crimen, ocurrido el 29 de ese mes en un maxiquiosco del barrio porteño de Floresta, fue condenado a “prisión perpetua por homicidio calificado por alevosía” el suboficial retirado de la Policía Federal Juan de Dios Velaztiqui, quien ya cumplió 71 años y sigue preso en la cárcel de Marcos Paz. “A mi hijo lo quiero recordar como un ser libre y también quiero agradecer el acompañamiento de tanta gente con la que seguimos luchando para que no haya impunidad en otros casos que ocurrieron en el país”, le dijo a Página/12 Elvira Torres, la mamá de Cristian. “Este es el primer diciembre en el que no estoy triste, porque siento que mi hijo me está pidiendo que siga adelante y con alegría”, confesó Silvia Yrigaray, la madre de Maximiliano.

“La idea de toda esta movida que estamos armando en el barrio es recordarlos con música, alegres como ellos eran. Por eso van a tocar los chicos de La Gaucha, que es la banda de rock seguidora de Los Redonditos de Ricota que se formó en el colegio secundario y en la que Cristian tocaba el bajo”, informa Elvira. La mamá de Cristian señala que “el vacío de la ausencia es bien grande y cada vez lo siento más, apenas me levanto de la cama. Es el dolor de no poder tocarlo”. Tanto ella como Silvia se han unido desde hace años a la Asociación Madres del Dolor y desde ese lugar “en el día a día tenemos contacto con otros familiares que han perdido a sus hijos. Con ellos hablamos el mismo idioma desde el mismo dolor, pero nos acompañamos y desde nuestro lugar, dado que tuvimos justicia y no hubo impunidad porque logramos una condena ejemplificadora, luchamos para que otros puedan tener el aliciente de que se castigue a los culpables de lo ocurrido”.

Elvira sonríe cuando recuerda a su hijo rockero, un bajista zurdo, como Paul McCartney. “Cristian no me dejaba que fuera a ver a la banda, pero ahora los chicos de La Gaucha me invitan. El 17 de diciembre dieron un recital en la biblioteca Manuel Belgrano y fue maravilloso verlos porque yo conservo el bajo de Cristian, que había sido modificado para que él pudiera tocarlo con la izquierda.” Elvira también habla sobre la situación del policía Velaztiqui. “Nosotros nunca actuamos con ansia de venganza, siempre creímos en la Justicia y nos dieron la razón. Velaztiqui todavía sigue preso y eso es lo que nosotros queremos, que cumpla la condena en prisión. El ya cumplió los 70 años en la cárcel y sus abogados pidieron que, por su edad, sea beneficiado con el arresto domiciliario. Ya hicieron dos presentaciones que fueron rechazadas porque la Justicia entiende que sigue siendo la misma persona agresiva que fue siempre.”

Silvia Yrigaray le confesó a este diario que éste es el “primer diciembre”, desde el asesinato de su hijo, que no se siente triste. “Te juro que dentro mío hubo una voz que es muda, que sólo yo la interpreto y que es la de Maxi. El me está pidiendo que siga adelante y que siga con alegría. Por eso este diciembre no es triste, por eso en la recordación de los chicos tiene que haber música. Los preparativos de la recordación han sido maravillosos por la participación que han tenido los jóvenes” del barrio de Floresta. “Por eso vamos a tener murgas como Los Pecosos, como Mala Yunta, que han colaborado con nosotras con amor y sacrificio.”

La mamá de Maxi Tasca afirma que la decisión de recordarlos “con alegría” se fortaleció el domingo 18 de diciembre, cuando fue invitada a hablar en un acto que se hizo en el teatro Colegiales y del que participaron 1500 jóvenes, para despedir a una banda de rock, Salta la Banca. “En ese grupo hay un muchacho que es sobreviviente de Cromañón. Son chicos muy espirituales, muy amorosos y ellos me pidieron que fuera a hablar de lo que había pasado con los chicos en aquel diciembre.” Dice Silvia que a ella le pareció, al principio, que era “un bajón” para los pibes, un recuerdo muy doloroso. Sin embargo, le pidieron “que me tomara todo el tiempo para hablar de nuestro caso porque es necesario mantener viva la memoria y mantenerla así, de esa manera, rodeados de jóvenes, de música y de alegría, que es como le gustaría a Maxi”.

De los actos también participarán los familiares de Adrián Matassa. Su mamá, Angélica van Eek, su papá Enrique y sus hermanos. “Todos vamos a estar y por eso hicimos 6200 afiches para repartir en el barrio y en distintas zonas. No hay olvido. Hace poco hubo un homenaje a los chicos en la cancha de All Boys y la adhesión fue muy fuerte. Los homenajes son importantes y nosotros tenemos que trabajar para que esto no se olvide.” La marcha fue convocada para hoy a las 18.45 en la esquina de Gaona y Bahía Blanca, frente al maxiquiosco donde ocurrió el triple crimen. Con posterioridad, desde las 19.30, se hará el festival “Música en memoria de ellos”, en Gaona y Gualeguaychú.

martes, 27 de diciembre de 2011

Hijos en el Centro Cultural Recoleta

El miércoles 28 de diciembre a las 20 hs. despedimos el año en el auditorio El Aleph del Centro Cultural Recoleta (Junín 1930). Los esperamos.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Hijos en Ranchos y Brandsen

El viernes 9 de diciembre a las 23.30 nos vamos a presentar en "La Valentina" (Ranchos) y el sábado 10 a la misma hora vamos a estar en “El Club Progreso” (Alberti y Ferrari - Brandsen). Los esperamos.

Con Hijos en Seth


Acá, más fotos.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Hijos en Pilar y Luján

El sábado 26 de noviembre a las 23 hs. nos vamos a presentar en “El Grillo Pérez” (Colectora y Almirante Brown - Pilar) y el domingo 27 a las 23.30 hs. vamos a estar en “El Dioni” (25 de Mayo 6700 - Luján). Los esperamos.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Diez años no es nada

Hijos en Luján y Suipacha

El viernes 11 de noviembre a las 23.30 hs. nos vamos a presentar en El Dioni, 25 de Mayo 6700 (Luján) y el sábado 12 a la misma hora vamos a estar en el Bar Ofelia,C. de San Lorenzo y Santiago del Estero (Suipacha). Los esperamos.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Los dos pilotos de Hiroshima


Por José Pablo Feinmann

En 1956, el filósofo vienés Günther Anders inicia una correspondencia con el piloto arrepentido, loco, definitivamente extraviado, de Hiroshima. Porque hay otro: sólido, impasible, que disfruta los frutos de un triunfo de la patria, la destrucción como ofrenda extrema entregada a la nación y a sus habitantes. Nos ocuparemos del primero. Del pobre loco. Aunque no dejaremos de mencionar el ejemplo que ha dejado al mundo el otro: el que fue capaz de asumir un genocidio como la más brillante de todas sus medallas, como el más destellante presente que podía un soldado ofrecer, primero, a su Ejército, y segundo en paralelo, a su nación y a sus habitantes. Qué tanto, ¡había que ganar esa guerra!

Günther Anders era un hombre de origen judío, había luchado en la Primera Guerra Mundial, había sido discípulo de Husserl y Heidegger, compañero de estudios de Hannah Arendt y se casa con ella en 1929. Los dos huyen de Alemania. Se divorcian en 1936. Tal vez los uniera más el espanto que el amor (por citar una frase trillada). Luego de la guerra se consagra al estudio de las partes más oscuras del ente antropológico. De su visita a Auschwitz deja el siguiente, estremecedor testimonio: “Si se me pregunta en qué día me avergoncé absolutamente, responderé: en esta tarde de verano cuando en Auschwitz estuve ante los montones de anteojos, de zapatos, de dentaduras postizas, de manojos de cabellos humanos, de maletas sin dueño. Porque allí tendrían que haber estado también mis anteojos, mis dientes, mis zapatos, mi maleta. Y me sentí –ya que no había sido un preso en Auschwitz porque me había salvado por casualidad– sí, me sentí un desertor”. De ahí en más desarrolla en sus textos temas ligados al tecnocapitalismo en la senda que su maestro Heidegger había marcado. Pero sin las marcas nacionalsocialistas que hieren el pensamiento del Rector Friburgo. En 1983, le otorgan el Premio Theodor Adorno, cuya importancia se conoce: no hay otro más alto en Alemania. Quien le entrega el Premio (un hombre que no acuerda con sus ideas, pero así es la democracia), dice: “Honramos aquí al filósofo Günther Anders porque él nos contradice, nos advierte constantemente, nos sacude”. Anders responde: “Soy sólo un conservador ontológico. Que trata de que el mundo se conserve para poder modificarlo”.

Claude Eatherly es uno de los pilotos que han dejado caer una de las bombas sobre Hiroshima. Vio el resplandor diabólico o místico, cuasi divino, bajo sus ojos. Cuando aterrizó, secamente le dijeron: “Mataste 200.000 personas en cinco minutos”. Nadie le había dicho eso... Eatherly no lo puede tolerar. Enloquece. Truman, en lugar de un héroe, recibe a un loco, lleno de cargas intolerables, herido por la culpa, por la autoflagelación. Lo meten en un loquero del Pentágono. Pasa ahí seis años. Queda libre. Pero para andar a la deriva. Llevando su tragedia de un lado a otro. Por fin, en Nueva Orleáns se empacha de barbitúricos buscando morir, pero lo salvan. El otro piloto es el coronel Thibbets. Es el que asume ser un héroe de guerra: “No siento ningún arrepentimiento. Soy un soldado y me dieron una orden. Cuando un soldado recibe una orden, la cumple. Si mueren 200.000 personas yo no tengo la culpa. No lo decidí y lo ignoraba”. Eatherly es culpable de, en lugar de ser un héroe, en lugar de hacerles sentir a los norteamericanos y al Ejército que ganaron esa guerra heroicamente, de angustiarse, sufrir y volverse loco. No puede vivir jamás tranquilo. ¿Cómo perdonarle eso? Entonces, ¿qué nos dice el loco de Eatherly? ¿Que todos debemos hacer eso? ¿Volvernos locos? ¡Qué locura!

Hasta que Günther Anders, el 3 de junio de 1959, le envía a Eatherly su primera carta: “El que escribe estas líneas es para usted un desconocido. Para nosotros, en cambio, para mis amigos y para mí, usted es una persona conocida. Seguimos con el corazón en un puño sus esfuerzos por salir de su desgracia (...) Como cada año, el próximo 6 de agosto la población de Hiroshima conmemora el día en que sucedió ‘aquello’. Usted podría enviar a esas personas un mensaje adecuado para tal conmemoración. Si se dirigiese a esas personas como ser humano diciéndoles: ‘En aquel momento yo no sabía lo que hacía, pero ahora sí lo sé. Y sé que jamás ha de repetirse algo similar’ (...) Lo que sería de justicia, puesto que también usted Eatherly, es una víctima de Hiroshima. Y puede que esto también fuese para usted, si no un consuelo, sí al menos un motivo de alegría. Con la expresión del afecto que siento hacia cada una de esas víctimas, le mando mis saludos”. Se entrecruzaron más de sesenta cartas de inevitable lectura.

viernes, 28 de octubre de 2011

Hijos en Brandsen

El sábado 29 de octubre a las 23.30 nos vamos a presentar en “El Club Progreso”(Alberti y Ferrari - Brandsen). Los esperamos.

Sin llaves y a oscuras

Era uno de esos días en que todo sale bien.
Había limpiado la casa y escrito
dos o tres poemas que me gustaban.
No pedía más.
Entonces salí al pasillo para tirar la basura
y detrás de mí, por una correntada,
la puerta se cerró.
Quedé sin llaves y a oscuras
sintiendo las voces de mis vecinos
a través de sus puertas.
Es transitorio, me dije;
pero así también podría ser la muerte:
un pasillo oscuro,
una puerta cerrada con la llave adentro
la basura en la mano.
Fabián Casas.

viernes, 21 de octubre de 2011

Hijos en Marcos Paz

El viernes 21 de octubre a las 23.30 hs. vamos a presentarnos en Telmo Estudio - Bar, Rivadavia 2121 (Marcos Paz). Los esperamos.

jueves, 13 de octubre de 2011

Hijos en Ranchos

El sábado 15 de octubre a las 23.30 hs. vamos a presentarnos en "La Valentina"(Ranchos). Los esperamos.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Mi fórmula secreta


En la televisión no hacían más que hablar de bombas y muertos. En todas las imágenes de los noticieros se veían aviones destrozando una ciudad. Los diarios cubrían sus portadas con fotos trágicas y titulares de fuerte impacto. Saddam Hussein, ese nombre difícil de pronunciar, estaba en boca de todos. Corría el verano del ’91 y la Guerra del Golfo mantenía en vilo al mundo entero. Yo tenía ocho años y mucho, mucho miedo. Estaba de vacaciones en Mar de Ajó con mi madre y mi hermano; mi papá sólo venía los fines de semana. “¿Y si tiran una bomba acá?”, solía preguntarle a mi madre. “No, hijo, eso es imposible. Nosotros no tenemos nada que ver con ese conflicto. Además, Mar de Ajó está muy lejos del Golfo”, me decía. “Sí que tenemos que ver, mamá, no me mientas. ¿No viste que el presidente mandó un montón de soldados para allá? ¿Mirá si ahora a ellos les agarra bronca con nosotros y empiezan a bombardear Mar de Ajó?”, le replicaba.
Lo cierto es que por las noches, antes de irnos a dormir, la obligaba a que cerrara todos los postigos y las ventanas de la casa. Después, sin que nadie me viera, agarraba mi almohada y me escondía debajo de la cama. Esa era mi fórmula secreta para despertarme a salvo y pasar otro día jugando en la playa.

viernes, 7 de octubre de 2011

Hijos en Tabú

El sábado 8 de octubre a las 24 hs. vamos a presentarnos en "Tabú Bar", E.Tapia de Cruz 845 (Escobar).

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Hijos en Luján

El viernes 30 de septiembre a las 23.30 hs. nos vamos a presentar en El Dioni, 25 de Mayo 6700 (Luján).Los esperamos.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Dejar de ser uno

Hablan de Colón, de un viaje
de un diario, de Tenochtitlán,
yo apenas escucho,
es sólo un ruido,
una voz que me distrae
de mi pensamiento,
de mi propio viaje
a ninguna parte.
Debí pensarlo antes de entrar.
Al menos una vez podría
no haberme traicionado.
¿Por cuánto tiempo uno puede dejar de ser uno?

martes, 13 de septiembre de 2011

Hijos en Cañuelas y Brandsen

El viernes 16 a las 23.30 nos vamos a presentar en “Old West” (Libertad y Belgrano -Cañuelas) y el sábado 17 a la misma hora vamos a estar en “El Club Progreso” (Alberti y Ferrari - Brandsen). Los esperamos.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

El retiro del Gato Guadio


A los fanáticos del Gato Gaudio, les recomiendo que se metan en este sitio que hizo la gente de Perfil.Los videos y las frases son imperdibles. Pasen y vean.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Hijos en Suipacha

El sábado 3 de septiembre a las 23.30 nos vamos a presentar en el Bar Ofelia (C. de San Lorenzo y Santiago del Estero – Suipacha). Los esperamos.



lunes, 29 de agosto de 2011

El mejor amigo de un soldado lloró su muerte



Jon Tumilson fue uno de los 30 soldados estadounidenses que murió en Afganistán el 6 de agosto cuando un lanzagranadas alcanzó un helicóptero Chinook. Su cuerpo fue velado en un servicio en Rockford, Illinois, al que asistieron 1.500 familiares y amigos, y Hawkeye, su perro y más fiel compañero.



El labrador retriever era una parte tan importante de la vida de Tumilson que las personas cercanas al soldado de San Diego llamaron a la mascota su "hijo".



Cuando el amigo de Tumilson, Scott Nichols, se dirigió al frente de la sala para decir unas palabras de recordación, Hawkeye lo siguió. "Y cuando Nichols se preparaba para despedir a su amigo, el perro se tumbó a los pies del ataúd", narró Today.com. No se apartó de allí durante todo el funeral.



La desagarradora foto del duelo de la mascota fue tomada por Lisa Pembleton, una prima de Tumilson, quien luego la publicó en Facebook.

Vía Yahoo! Noticias.

Tocando en Chascomús



Acá, más fotos.

viernes, 26 de agosto de 2011

Los ojos del perro siberiano



"Cuando empezó a tomar AZT, Ezequiel se vio obligado a llevar una dieta sana y a realizar ejercicios, para contrarrestar los efectos de la droga.

Todos los días salía con Sacha a realizar largas caminatas, y esas caminatas lo llevaban lunes, miércoles y viernes, a la puerta del instituto donde yo estudiaba.

La primera vez que lo vi parado en la puerta esperándome, me temblaron las rodillas, a mí no se me había permitido ir a verle a la clínica, es más, hacía más de tres meses que no nos veíamos, si bien yo estaba enterado de todo lo que pasaba, había desarrollado un sexto sentido para escuchar a mis padres cuando hablaban de él, y además la abuela, siempre la abuela, me contaba. Me sentía en falta por no haberlo visitado.

—No me dejaron ir a verte —le dije sin saludarlo siquiera.

Ezequiel sonrió, tenía una sonrisa apagada, todo él estaba apagado, no era ya la persona luminosa de antes. Estaba asustado, algo de lo que no me di cuenta hasta que fue tarde.

—Ya sé, no importa. La abuela siempre me manda saludos tuyos. ¿No te molesta que te venga a buscar?

Le contesté que no, por supuesto. Esa primera vez y las siguientes nos limitamos a caminar en silencio hasta la parada del colectivo, con Sacha correteando entre ambos.

A la segunda semana, Sacha ya saltaba para recibirme apenas ponía un pie fuera del instituto. Lo cual me hizo ganar la simpatía de muchos de mis compañeros.

Sacha nos daba tema de conversación. Yo no me animaba a preguntarle de su enfermedad, ni de su dieta, entonces le preguntaba sobre la dieta de Sacha. Ezequiel me contaba qué le daba de comer y cómo la cuidaba, de los libros que había leído para cuidarla bien. Se lo tomaba todo con absoluta seriedad, sabía muchísimas cosas de los perros del ártico, su historia, sus costumbres, y sus diferencias con los perros de origen europeo.

Hablando de ella fue que un día me dijo:

—Uno de los motivos porque quiero tanto a este perro es por sus ojos. Desde que estoy enfermo la gente me mira de distintas maneras. En los ojos de algunos veo temor, en los de otros intolerancia. En los de la abuela veo lástima. En los de papá enojo y vergüenza. En los de mamá miedo y reproche. En tus ojos curiosidad y misterio, a menos que creas que mi enfermedad no tiene nada que ver con que estemos juntos en este momento. Los únicos ojos que me miran igual, en los únicos ojos que me veo como soy, no importa si estoy sano o enfermo, es en los ojos de mi perro. En los ojos de Sacha".

Antonio Santa Ana

miércoles, 24 de agosto de 2011

Hijos en Chascomús y Saladillo

El viernes 26 a las 23.30 nos vamos a presentar en “Unbar” (Av. Lastra y Costanera - Chascomús) y el sábado 27 a la misma hora vamos a estar en “Carpe Diem” (Pereyra 3936casi Ruta 205 - Saladillo). Los esperamos.

viernes, 19 de agosto de 2011

El poder de la literatura

Acabo de terminar “La venganza del cordero atado”, el primer libro de César González(Camilo Blajaquis). No sé si su obra posee un potencial talento artístico, no seré yo quien la juzgue. Lo que sí puedo afirmar es que vale la pena leerla sólo para comprobar el milagro que la literatura pudo realizar en un chico con su historia de vida.

Para aquellos que quieran saber más acerca de este joven que logró dejar de ser un “pibe chorro” para convertirse en un poeta, les dejo un poema y un video en el que cuenta cómo fueron sus años de encierro.



Panorama Instantáneo



La calle parece tan lejos.

Mi casa. Mis hermanos.

Celdas. Paredones. Policías.

Todo es muy perfecto.

Un avión que despega trae alivio.

El mundo todavía existe.



La libertad es una monja

nunca nadie la ha poseído.

Aquí los apartados del mundo

la basura bajo la alfombra

la injusticia maquillada con alambrados.



Síntomas de una humanidad enferma

rehénes del olvido y el desprecio

Hora del recuento.

Silencio, obediencia, rencor mudo…





miércoles, 17 de agosto de 2011

Hijos en Cañuelas y Gral. Rodríguez

El viernes 19 a las 23.30 nos vamos a presentar en “Old West” (Av.libertad 523 – Cañuelas) y el sábado 20 a la misma hora vamos a estar en “El Refugio de Montaña” (Avellaneda 890 – Gral. Rodríguez). Los esperamos.

martes, 16 de agosto de 2011

Noticias de la muerte



Por Reynaldo Sietecase



Se murió un ex compañero de la escuela. Me lo comunicaron con un mensaje de texto simple y directo: se murió Marcelo Costa. Fue justo en el momento en que estábamos organizando un encuentro de condiscípulos. Uno de esos ritos en los que con aire jocoso y fraterno recordamos lo que fuimos cuando el mundo era nuestro y la muerte apenas una palabra.

Se murió Marcelo Costa. No era mi amigo, pero la noticia me provocó una inexplicable congoja. Era uno de los más estudiosos del curso. La última vez que nos vimos, me enteré de que lo habían nombrado juez en una localidad cercana a Rosario. Estaba un poco gordo pero recuerdo que se reía de eso. Me contó que el techo de su juzgado tenía humedad, que le faltaba gente y sobraban expedientes y que, a pesar de las dificultades, le gustaba lo que hacía. Parecía el mismo chico del cole. Aplicado, correcto, un poco olfa.

Desde hace unos días me pregunto por qué la noticia me causó tanta tristeza. Más allá de aquel encuentro de ex compañeros con Marcelo Costa no mantenía ninguna relación. Además, siempre pienso que estoy bastante armado ante la tragedia. Tengo cierta experiencia. Perdí a mi madre siendo adolescente, luego a mi padre y un par de mis amigos se fueron de copas sin avisar y nunca más volvieron. Pero algo me pasó con la noticia.

¿Será la idea de la propia finitud? Creo que era Bioy Casares quien decía que ochenta años era muy poco tiempo para todas las cosas que quería hacer y lamentaba que la vida y la pasión fueran demasiado cortas. Murió a los 84. Al igual que su amigo Borges, el escritor argentino más elegante pretendía ochocientos años de vida aunque era consciente de que a los setecientos noventa y nueve querría pedir ochenta más.

Por las dudas, si alguien de allá arriba está tomando la lección no pienso levantar la mano. En la escuela casi nunca lo hacía, ni siquiera cuando estudiaba. Ahora que lo pienso, tal vez fue eso: Costa siempre estaba dispuesto a pasar al frente.

La muerte es un misterio. Es algo extraño porque si bien varias culturas la tienen como su centro, los vivos no saben nada de nada. Sólo se conoce lo que se ha perdido. El dolor que provoca la ausencia del ser querido. Después viene la resignación. Y más tarde, si persiste el amor, el recuerdo. Eso es lo que de verdad se conoce. Lo demás es pura imaginación. Nadie vuelve para contarlo. Ni siquiera Víctor Sueiro. Cuando el hombre tomó conciencia de ese abismo, se disparó la fantasía del regreso posible.

La literatura visitó el tema hasta el cansancio. Para las religiones no hay nada que discutir: hay otra vida con premios y castigos. Lo que se dice una promesa asegurada. En mi caso trato de reemplazar mi poca fe por un deseo poderoso. Ojalá sea como dicen. Ojalá volvamos a vernos.

A pesar de mis reparos, visito a mis muertos. No voy tanto como mi padre querría, pero voy. Tampoco estoy seguro de que estén allí los que están allí, pero voy. Es un punto de referencia. Mi padre está en un cementerio tipo jardín, cerca del aeropuerto de Fisherton. Un lindo lugar con árboles que él no puede apreciar. Le llevo flores y coñac para hacer más amable nuestra conversación. Lo extraño.

Mi madre y mis abuelos están en el cementerio El Salvador de Rosario, en el Parque de la Independencia. El lugar es un amasijo arquitectónico que contiene algunas esculturas del genial Lucio Fontana. En la actualidad está siendo intervenido artísticamente por otro talento rosarino, Dante Taparelli, quien intenta poner belleza y memoria en acción donde sólo hay cemento gris y frío. Levantó una gran pared con las fotos de las lápidas que quedaron en el abandono. Es un friso repleto de miradas que ya no miran nada.

Cada vez que paso frente a esa pared me gustaría gritar que no tengo nada que ver con la muerte. Pero sería en vano. Por eso me limito a saludar con un movimiento de la mano. Después voy en busca de la tumba de Nilda Gladis Deni para dejar unas flores, en lo posible amarillas. Ante su silencio impasible y mis dificultades para rezar, siempre descubro lo mismo: mi mamá era linda, muy linda.

martes, 9 de agosto de 2011

El faro



Viento y sal,

sol de atardecer,

luz fugaz,

sueños que hacen pie.



Un faro en el mar,

en la noche sin red,

un faro y un haz,

que gira para ver.



Claridad,

nuevo amanecr,

despertar,

silenciosa sed.



Un faro en el mar,

que espera anochecer,

un faro y un haz,

que guía al timonel.



Cabo Polonio 25/01/07

sábado, 6 de agosto de 2011

Leer y escribir


“Esta mañana vi, en un banco del Parque Intercomunal, a una mujer leyendo. Me senté enfrente para verle la cara y fue imposible. El libro absorbía su mirada y por momentos creí que ella lo sabía. Que alzar el libro de esa manera – a la estricta altura de los ojos, con ambas manos, con los codos apoyados en una mesa imaginaria – era su forma de esconderse.
Vi su frente blanca y el pelo casi rubio, pero nunca sus ojos. El libro era su antifaz, su preciada máscara.
Sus dedos largos sostenían el libro como ramas delgadas y vigorosas. Me acerqué en un momento lo bastante como para mirar incluso sus uñas cortadas sin rigor, como si acabara de comérselas.
Estoy seguro de que sentía mi presencia, pero no bajó el libro. Siguió sosteniéndolo como quien sostiene la mirada.
Leer es cubrirse la cara, pensé.
Leer es cubrirse la cara. Y escribir es mostrarla”.
Alejandro Zambra.

viernes, 5 de agosto de 2011

Impreso en Argentina

No todo es Tinelli, Rial y Chiche Gelblung, en la tele también hay cosas que valen la pena. Impreso en Argentina,el programa de Pedro Mairal en Canal Encuentro es un buen ejemplo. Acá pueden ver on line el capítulo en el que Fabián Casas, Silvia Iparraguirre y Anibal Jarkowsky hablan de Rayuela.
Los que tienen cable, pueden verlo los miércoles a las 18:30 o en las repeticiones: Jueves 14:30, Viernes 10:00, Sábados 09:00.
En los próximos capítulos abordarán la lectura de los siguientes libros:
Capítulo 6.- Misteriosa Buenos Aires
Capítulo 7.- Cuentos de amor de locura y de muerte
Capítulo 8.- La Furia
Capítulo 9.- El Entenado
Capítulo 10.- Adán Buenosayres
Capítulo 11: Los Pichiciegos
Capítulo 12.- El túnel
Capítulo 13.- Boquitas pintadas

miércoles, 3 de agosto de 2011

Fuera de mí mismo


"Hoy me desperté con una marcada sensación de disgusto conmigo mismo. Ese disgusto tiene que ver, según he podido percibir, con el hecho de llevar ya demasiado tiempo -demasiados años- viviendo fuera de mí mismo, ocupándome de cosas que suceden fuera de manera exclusiva. Y, de todos modos, cuando en algunas oportunidades he logrado llevar la mirada hacia dentro, no me he conectado con las partes más sustanciales de mí mismo, sino con los aspectos más triviales, "subconscientes". ¿Qué se ha hecho de mi alma? ¿Por dónde andará? Hace un rato le decía a Alicia que me sentía mal porque hace mucho no me conecto con la eternidad. Esto quiere decir que percibo las cosas superficialmente, que no tengo vivencias, que estoy apartado del Ser Interior; demasiado apartado, y sin tener la menor noción de los caminos posibles para acercarme. No importa qué es lo que se está viviendo cuando uno está apartado de sí mismo, todo carece igualmente de peso, todo transcurre sin dejar ninguna huella memorable.
La causa de todo esto no está, como a menudo tiendo a creer, en los reclamos del mundo exterior, sino en mi apego, o mi compromiso, con estos reclamos".
Mario Levrero

martes, 2 de agosto de 2011

Hijos en Ranchos

Agua de mar


Agua de mar,
luz mortecina,
poetas que se van,
olas suicidas.

Agua de mar,
barcos de arena y sal,
agua de mar,
cenizas de coral.

Agua de mar,
en sus pupilas,
recuerdos de cristal
que se hacen trizas.

Agua de mar,
crepúsculo estival,
agua de mar,
delfines que se van

Agua de mar,
algas dormidas,
miradas que se cruzan
y se esquivan.

Agua de mar,
espuma, yodo y sal,
agua de mar,
castillos sin final.

Agua de mar,
playas vacías,
amores que se quedan
en la orilla.

Agua de mar,
heridas sin cerrar,
agua de mar,
sirenas que se van.

lunes, 25 de julio de 2011

Con Hijos en "El Barco"


Acá, más fotos.

El Príncipe

Hace unos días que no me puedo sacar una canción de la cabeza. El tema en cuestión se llama “Cómo que no”, el autor es Gustavo Pena Casanova, más conocido como El Príncipe, un músico de culto uruguayo que falleció hace unos siete años. Tras su muerte, su hija se convirtió en la principal difusora de la obra de su padre. Gracias a ella, muchas de las originales canciones del Príncipe fueron rescatadas del olvido con la autoridad genética y artística que le da su voz.
Los que quieran seguir investigando más acerca de la obra y la vida del Príncipe, les recomiendo que vean el documental "La Cocina" de Willy Villalobos.
Abajo, les dejo la primera parte de la película que casualmente incluye una versión de "Cómo que no".

martes, 19 de julio de 2011

Hijos en Tirana

Mañana a las 23 hs. nos vamos a presentar en Tirana Resto-Bar, Rivadavia 250 (Escobar).Los esperamos.

domingo, 10 de julio de 2011

Facundo Cabral

El sábado me desperté con la noticia de su muerte. Todavía no lo puedo creer. Si bien nunca fui un fanático suyo, reconozco que tenía algo que me atrapó desde muy chico. Su vida tuvo un final tan trágico y gradilocuente como muchas de las historias que solía contar. Quedará en la memoria de todos y en el corazón de otros tantos por haber compuesto una hermosísima canción. Quizás, sólo con eso ya haya justificado su paso por esta tierra. Para recordarlo, les dejo un video con uno de sus tantos monólogos.

sábado, 2 de julio de 2011

Hijos en la tele

Amigos, les dejo un videíto con una pequeña entrevista y algunos de los temas que estuvimos haciendo en el Escenario Rock del Ecunhi.
Si quieren seguir viendo, acá hay más videos.

lunes, 27 de junio de 2011

La arquitectura de la mentira


"Creo que para ser autobiográfico hay que agregar muchísima ficción. El riesgo que se corre es muy grande. Si quiero transmitir un dolor profundo y te cuento tal cual fueron los acontecimientos, no funciona. Pero si le agrego una escena de ficción, como la de la mujer de las uvas al principio de la novela, armo con esa arquitectura de la mentira una verdad que siento en el corazón y así es más probable que logre transmitir lo que quiero.
Creo que como escritor hay que ser honesto con lo que uno está escribiendo. Escribir sobre mi vida no significó decir la verdad sobre mi mamá, la verdad sobre mí, que por otro lado no existe. Uno va a contar una historia y tiene una sensación de esa historia. Si por temor o por cobardía no hace todo lo que tiene que hacer para intentar comunicar y compartir esa sensación, falla. Y la honestidad radica en que cada escena sea puesta por una necesidad de la historia. No hay ningún otro motivo para que algo esté ahí. A mí me interesa mucho rozar el lugar común como lugar estético. Tal vez sea más fácil esquivar esa mención a lo sentimental, pero yo prefiero arriesgar ese roce con el lugar común, con mi intuición como única herramienta y creo que a veces me sale".
Pablo Ramos

viernes, 24 de junio de 2011

Madres e hijos


Por Martín Kohan
“Primero mató a la madre, y ahora mató a las Madres.” La sonora declaración de prensa pertenece a Eduardo Duhalde y hace referencia, claro está, a Sergio Schoklender. No hay motivos para negar que la frase es bastante sugestiva. Por lo visto, a Duhalde se le dan realmente bien las frases con juegos de repetición verbal, del tipo de aquella otra que en su hora también pronunciara: “El que puso dólares va a recibir dólares”. No obstante esto que dijo hace días sobre Schoklender, al igual que aquello que dijo sobre los ahorros, es falso en un sentido cabal. Que Schoklender mató a su madre es cierto: está probado ante la Justicia. Pero no está probado ante la historia que haya matado a las Madres con su desfalco de maniobras turbias. Nuestro ex presidente interino se apuró con su veredicto, o expresó no tanto un parecer como una intuición o un temor o un deseo.
Más verdadera, en todo caso, creo yo, es la frase que entregó Elisa Carrió: “De qué vale decir que son de izquierda, si andan en Ferrari”. Admito que por lo común me cuesta congeniar con lo que dice Lilita: presiento que me iría mejor accediendo al remolino de sus trances místicos o creyendo en ese Dios que ella invoca y con el que cuenta. Como no me sucede jamás ni una cosa ni la otra, suelo quedarme bastante afuera de lo que formula, contemplando un tanto absorto su ferviente pasión por la verdad, un poco como si esa verdad fuese dicha en otro idioma, un idioma que no hablo. Sin embargo, en este caso, leí sus palabras en el diario, reponiendo sobre la impresión gráfica la gracia de sus entonaciones irónicas. Y me dejé persuadir por su cáustico argumento. En efecto, me dije: de qué vale decir que son de izquierda, si andan en Ferrari.
Por supuesto que no mezclo izquierda con franciscanismo, ni supongo que para sostener esta clase de ideología deba hacerse ningún voto de pobreza. Es tramposo presumir que hay en la izquierda algún gusto por la miseria o que el reparto de la nada forma parte de sus plataformas. Todo eso es erróneo en su concepto, si es que no un ejercicio de la mala fe; pero puede pese a eso decirse que es verdad que un cierto recelo respecto de lo suntuoso forma parte de su sensibilidad. El lujo como tal, lo grosero de la opulencia, lastima el temperamento de izquierda: es un sello de injusticia en un mundo de explotación que produce desigualdades intolerables.
Dicho con otras palabras, y de forma más concreta: cabe desconfiar por definición de quien tenga una Ferrari. Y si además de la Ferrari tiene un yate, y si además del yate tiene un avión, tanto más. Sin que importe demasiado dirimir si adquirió tales bienes sin visos de ilegalidad, lo que además no parece ser el caso, porque la legalidad en última instancia no aliviana la ilegitimidad del origen de toda gran riqueza. Es decir que incluso no habiendo dolo, y además parece haberlo habido, habría sido mejor desconfiar de un apoderado tan poderoso: no gustar de una persona que guarda Ferraris en su garage.
¿Desdibuja esta situación el lugar histórico de las Madres de Plaza de Mayo? Al contrario, lo fortalece. ¿Ha matado Schoklender a las Madres, como ha dicho Eduardo Duhalde? Al contrario, las vivifica. Porque las Madres no son madres sin más: son madres de hijos que faltan. Y faltan por las razones que ya sabemos: porque formaron parte de un proyecto de transformación social que fue vencido con los más feroces recursos, con los más terribles métodos. Las Madres son madres de esa falta y de esa ausencia. Y esa falta y esa ausencia tienen bastante que ver, a la vez, con que perdure la indignidad de un mundo con hambre y con miseria y también con Ferraris y con yates.
¿Pudo acaso suscitar Sergio Schoklender algún tipo de figuración imaginaria de una especie de filialidad restablecida? Según parece, así sucedió. Vino a paliar, como entenado, a la par de su hermano Pablo, la vacancia de los hijos que hace años se perdieron. Sus mentiras de estafador no dejan de subrayar una verdad de la historia política: que esos hijos no se perdieron por nada. Su Ferrari, su yate, su avión confirman por la negativa, desde su abyección fraudulenta, el sentido histórico de las Madres de Plaza de Mayo: lo que hizo que aquellas madres fuesen las Madres. Porque están fundadas sobre una falta, porque están fundadas sobre un lugar vacante. Y lo que vino a demostrar Sergio Schoklender, así fuese de manera miserable, es que el lugar de aquellos hijos, los que faltan, no se ocupa con facilidad, ni tampoco cuando uno quiere.

jueves, 23 de junio de 2011

Mañana en el programa de las Madres

Mañana, de 23 a 24 horas, en "La Clementina", van a pasar algún fragmento de lo que estuvimos haciendo el jueves pasado en el Ecunhi." La Clementina" es el ciclo de la Asocición Madres de Plaza de Mayo, que se emite por CN23, conducido por Hebe de Bonafini y Teresa Parodi. CN23 se puede sintonizar por disitintos sistemas de cable (canal 9 de Telecentro, canal 271 de DirecTV, canal 10 de Antina) y también por Internet en www.cn23.tv . A partir del lunes, además, el programa podrá verse por la televisión virtual de las Madres.

miércoles, 22 de junio de 2011

A 25 años del Diegol



El arte en 44 pasos y 12 toques

"Estoy seguro de que en una carrera sobre la misma distancia en una pista de atletismo Diego habría quedado detrás de los cinco ingleses a los que dejó en el camino". Fernando Signorini, el preparador físico que conoce mejor que nadie el cuerpo de Maradona, me dice también que los 10,6s que Diego empleó para recorrer 52 metros en su golazo a Inglaterra de México 1986 serían una afrenta en eventual competencia con Usain Bolt y su marca de 9,58s en los 100 metros. Por eso, Signorini se sorprende de que hoy, 25 años después, haya comentaristas que destaquen "la centelleante velocidad" de Diego en el que la FIFA premió como el mejor gol en la historia de los Mundiales.
Esos dos goles elevaron a Maradona al altar eterno. Y sirvieron para que el fútbol argentino 'matara' al padre
Para ganar, el atleta necesita correr a la mayor velocidad. El futbolista, en cambio, debe elegir la mejor velocidad de acuerdo a la jugada. Maradona, como apunta Signorini, supo cuándo aplicar el freno, el engaño y el manejo del tiempo y el espacio para dejar en el camino a medio equipo inglés. E hizo más. En sus 44 pasos y 12 toques de zurda al balón, también se hizo tiempo para ver que Jorge Valdano arrastraba la marca de Terry Fenwick. Y para recordar que, cinco años antes, su hermano El Turco, que entonces tenía apenas siete, lo había criticado porque en una jugada similar de 1981, en Wembley, no amagó y el remate salió afuera. "Todo lo que hacemos con los pies lo hemos de hacer antes con la cabeza", dijo alguna vez Alfredo Di Stéfano. Maradona, entonces, amagó hacia dentro y eligió correr hacia fuera para burlar el último obstáculo, el arquero Peter Shilton, y definir de zurda con el cuerpo inclinado para evitar una embestida final.
Cuando frena su odio por La Mano de Dios, que Maradona había marcado cuatro minutos antes, Inglaterra debate si el seleccionador, Bobby Robson, no debió haber destinado una marca individual a Diego para evitar ese segundo gol. Algunos invocan la nobleza de sus jugadores, que no apelaron a la falta. Pero Peter Reid, que tenía problemas en un tobillo, confesó que quiso desestabilizarlo empujándolo con un codo y llegó tarde. Diego lo superó con un giro a él y a Peter Beardsley. A partir de allí, corrió casi recto con la ventaja del zurdo que arranca por la derecha. Con el factor sorpresa de su lado. Los ingleses debían esperar su decisión. Terry Butcher, inevitable, se tragó el amago y el engaño lícito de la gambeta. Y Fenwick, amonestado desde los nueve minutos por una entrada brutal a Diego, temió la expulsión y se cruzó tarde. "¡Genio! ¡Genio! ¡Genio!", gritó desbordado el relator Víctor Hugo Morales. "La jugada de todos los tiempos... Barrilete cósmico... ¿De qué planeta viniste para dejar en el camino a tanto inglés?".
En las tribunas del estadio Azteca, 114.583 espectadores fueron testigos de la obra de arte. Y también de las peleas entre barras bravas argentinas y hooligans ingleses. La Guerra de Malvinas, de 1982, jugó su parte. En su filme Maradona by Kusturica, el cineasta serbio incluyó en la carrera del gol del siglo a Margaret Thatcher y al príncipe Carlos. Esos dos goles ante Inglaterra, dice el escritor Eduardo Sacheri, profesor de Historia, elevaron a Maradona al altar eterno. Pero sirvieron también para que el fútbol argentino matara a su padre. Solo muerto el padre, escribió Juan Sasturain, Argentina, que en el 78 había ganado en dictadura, celebró por fin en democracia. Lionel Messi hizo en 2007 un gol casi calcado, acaso más bonito, con túnel incluido y cinco décimas de segundo más lento. Pero fue ante el Getafe en la Copa del Rey. No alcanza para acercarse al mito.
Ezequiel Fernández Moores.

viernes, 17 de junio de 2011

Tocando en el "Ecunhi"



Acá, más fotos.

Hijos en Ciudad Emergente


Hasta el 20 de junio, en el Festival Ciudad Emergente, se van a repartir los discos que realizó el Gobierno de la Ciudad bajo la consigna "Música por la prevención". Nosotros tuvimos la suerte de formar parte del material con la canción "Puertas Cerradas". Los que estén interesados, se pueden acercar al stand del Espacio Escucha dentro del Centro Cultural Recoleta y llevarse su copia. La entrada es libre y gratuita.

jueves, 16 de junio de 2011

Una indemnización por la masacre de Floresta


Los tres muchachos miraban un canal de noticias que transmitía imágenes de un grupo de manifestantes golpeando a un policía. Eran las 4.10 de la madrugada del 29 de diciembre de 2001 y estaban en el maxikiosco de una estación de servicio en Floresta. “Está bien, es por lo que hicieron la semana pasada”, comentó Maximiliano Tasca, en alusión a la represión de la protesta del 19 y 20 que liquidó al gobierno de Fernando de la Rúa. En ese momento, el policía Juan de Dios Velaztiqui sacó su pistola, dijo “basta” y le disparó a quemarropa en la sien. A Cristian Gómez le tiró en la nuca y a Adrián Matassa en el estómago. Los tres murieron y el caso se conoció como la Masacre de Floresta. Ayer la Cámara en lo Civil y Comercial Federal dispuso que los familiares de Tasca y Gómez sean indemnizados por el Estado con más de 1.250.000 pesos. El crimen de Matassa se investiga en un expediente por separado.

El año pasado, la Justicia en primera instancia había dado orden de pagar una indemnización, pero ahora el tribunal aumentó los montos, por lo cual los Tasca cobrarán 678 mil pesos, mientras que los Gómez recibirán 575 mil. En la misma resolución se exime de responsabilidad a los dueños de la estación de servicio porque no tenían posibilidades de dar órdenes en ningún sentido al policía Velaztiqui, ya que “no se desempeñaba en relación de dependencia con la referida firma comercial, mientras que sí lo hacía con la Policía Federal”.

De hecho, el uniformado trabajaba como custodio, pero lo hacía en sus horas “adicionales”. “La diligencia exigible –sobre todo si se trata de una institución como la Policía Federal, por la índole de las funciones cumplidas por sus integrantes– no se agota en la elección de su personal, sino que también le incumbe el estricto control de su desempeño y conducta, aun más si se tiene en cuenta que a sus agentes les hace entrega de un arma, cosa indudablemente peligrosa”, enfatizaron los jueces de la Sala III de la Cámara en lo Civil y Comercial federal, Ricardo Recondo y Graciela Medina.

“La imagen de unos manifestantes agrediendo a un policía motivó dos comentarios de Gómez, ante lo cual Juan de Dios Velaztiqui –quien revestía como suboficial auxiliar de la Policía Federal y prestaba servicio de seguridad–, que también se hallaba en el interior del local, se levantó y con su arma reglamentaria dio muerte a Gómez y Tasca”, explicaron en el fallo. En aquel momento el policía fue trasladado a la comisaría 43ª y no pudo ser llevado a la alcaidía de Tribunales porque los vecinos mantuvieron sitiada la seccional durante toda la jornada.

Velaztiqui fue condenado el 10 de marzo de 2003 por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº13 a la pena de prisión perpetua por los tres asesinatos. En el juicio, que duró seis días, su defensa no puso en duda los hechos, sólo intentó plantear que el policía disparó por estar bajo un estado de shock emocional profundo, pero no pudo revertir la sentencia por “homicidio calificado por alevosía, reiterado en tres oportunidades”. Se había ganado el apodo de “el Trotador” por haber obligado a parte de la hinchada de Nueva Chicago a ir trotando hasta la comisaría 42ª, lo cual le había valido su primera causa judicial.
Vía Página/12.

lunes, 13 de junio de 2011

Hijos en el ciclo Escenario Rock

Tu nombre

Tu nombre es un fantasma
que habita en los rincones
de esta pieza vacía
estéril de ilusiones.

Tu nombre por las noches
tiene un sabor amargo
que hace sangrar mi boca
tan sólo con nombrarlo.

Tu nombre está poblado
de historias y recuerdos
que inundan mi memoria
con charcos de silencio.

Tu nombre es una grieta
que no puede cerrarse,
es una herida inmensa,
un duelo interminable.

Tu nombre lleva atado
el sueño que no ha sido,
las ganas de perderme
y el miedo de estar vivo.

domingo, 5 de junio de 2011

El niño que fui


"Quiero recuperar, saber, reinventar al niño que fui. Puede parecer una cosa un poco tonta: un señor que a su edad piensa en el niño que fue. Pero creo que el padre de esa persona es el niño que fui. Tenemos un padre biológico y una madre biológica, pero yo diría que el padre espiritual del hombre que soy es el niño que fui".
José Saramago.

miércoles, 1 de junio de 2011

Los 53 goles de Messi

En la temporada que acaba de terminar, Messi hizo 53 goles. Es, sin dudas, el mejor jugador del mundo y el máximo goleador de la Champions por tercer año consecutivo.
En el video que les dejo, se pueden ver las 53 joyitas que nos regaló sólo en este año. Esperemos que nos regale muchas más y si es con la celecte y blanca, mejor.

viernes, 20 de mayo de 2011

jueves, 12 de mayo de 2011

La realización del estado de infancia


“La poesía es la realización del estado de infancia que debe permanecer a través de todas las edades del hombre. Y llamo estado de infancia a esa frescura, sensibilidad, disponibilidad, a esa apertura hacia todo lo que aparece; hacia todo lo que parece viejo y es nuevo. Hasta la materia misma puede acceder a lo que llamamos vida, y la poesía es el descubrimiento de la realidad interior de las cosas"
Juanele Ortiz.

martes, 10 de mayo de 2011

Las cosas que nosotros no podemos

A pesar de que cada vez son más
"las cosas que nosotros no podemos",
cada vez estamos más contentos.
Nos encanta saber que podemos vivir
sin todas esas zanahorias
que muchos persiguen,
como conejos famélicos.
No lamentamos ni un poco
quedarnos afuera de esas grandes fiestas
a las que no vamos,
a las que no nos invitan,
porque ya saben
que "nosotros no podemos".
Incluso,
tenemos que reconocer que
somos bastante felices en nuestro mundo,
que para otros quizás
puede ser un mundo trunco,
lleno de privaciones,
de deseos incumplidos.
En cambio, para nosotros no.
Todo lo contrario.
Nosotros disfrutamos
de "tener menos para tenernos más".

lunes, 9 de mayo de 2011

Todo el mundo sabe escribir hipotermia



Juan José Millás

La foto, aparecida en el suplemento que publican conjuntamente EL PAÍS y The New York Times, ilustraba un reportaje sobre el hambre en el mundo. La anciana del turbante agujereado, que quizá no tenga más de 35 años, es somalí y está masticando un pedazo de piel de camello del que no es probable que obtenga ninguna caloría, aunque, si lograra tragárselo, apaciguaría durante unos instantes el motín que se ha producido en sus entrañas. El hambre, que en el estómago de usted o en el mío no pasa de ser una sensación, en el de esta mujer es un lobo que aúlla desde los intestinos y al que hay que engañar con cualquier cosa (una raíz, una bola de barro, una corteza...).
Las técnicas para aliviar las dentelladas del hambre varían, según el citado reportaje, de unos a otros países. En Eritrea, las mujeres se atan una piedra plana al vientre para atenuar las convulsiones; las madres de muchos países africanos ponen al fuego una sartén con piedras y dicen a los niños que la comida está haciéndose para ver si se quedan dormidos mientras aguardan; en Haití son muy frecuentes las tortas de barro, cuyo valor energético es el mismo que el de un paño de cocina recién lavado, pero que proporcionan sensación de plenitud mientras la tierra da vueltas dentro del estómago.
La cantidad de energía que tienen los alimentos se mide en calorías. Una bolsa de la basura de usted, o mía, recibe en unas horas más calorías que las que llegarán al estómago de la mujer de la foto a lo largo de su existencia. Los inmigrantes que se juegan la vida en el Estrecho no buscan otra cosa que calorías. Mientras usted y yo nos buscamos a nosotros mismos, porque tenemos problemas existenciales, ellos arrojan su documentación al mar para no ser repatriados. Cambian identidad por calorías y vienen en busca de ellas como en otro tiempo se iba a Alaska en busca de oro. La fiebre del oro estaba alimentada por los delirios de grandeza; la de la caloría sólo busca acallar al lobo y obtener la cantidad de energía mínima para seguir tirando, incluso a costa de olvidar quién se es. Muchos inmigrantes gastan sus últimas calorías en atravesar el Estrecho. Por eso llegan a las playas exhaustos, cuando no muertos, y ateridos de frío. Ninguna palabra se había puesto tan de moda en tan poco tiempo como hipotermia. Sale en todos los telediarios siete u ocho veces y hasta los niños saben escribirla, aunque tenga una hache.
Quiere decirse que todos mienten, desde el FMI al Banco Mundial, pasando por las decenas de organismos internacionales creados para resolver cosas. Si se puede llenar el Tercer Mundo de armas, que pesan como el diablo, ¿cómo no se va a poder llenar de calorías? Por el precio que cuesta trasladar un tanque, se podría hacer caer sobre África un maná energético. Bastaría que se hubieran exportado a África la mitad de frutos secos que de balas para que esta mujer no estuviera tratando de ablandar con los dientes la piel de un camello (¿dónde estará, por cierto, a estas alturas, el camello?). Debería ser más fácil hacer una transferencia de calorías que una transferencia bancaria. Pero por la bancaria cobran comisión, así que son rentables. El mundo es una mierda.

domingo, 8 de mayo de 2011

El grito no muere


“Cuando era pequeña, Isaac, me preguntaba dónde iban los sueños. Tú sueñas, y el sueño es como el agua. ¿Dónde va toda esa agua? ¿A los mares? Y luego, ¿serán nubes? Los sueños, entonces, regresan con las lluvias.
¿Y los gritos? Hoy me pregunto, los gritos, ¿dónde van? No pueden, no deben perderse. No es posible que se pierdan, no pueden deshacerse en la nada, no pueden morir en nada, morir para nada, para algo se han creado, para algo se han gritado, Isaac, el grito no muere, no puede morir. No muere. Nosotros sí que morimos, cada amanecer, en cada selección de Grete, en cada tren que llega. Pero nuestros gritos no, el grito no.
Quiera Dios que nuestros gritos se escondan bajo las almohadas de los que no saben, de los que saben y callan, de los que no quieren saber”.
Mauricio Rosencof.

martes, 3 de mayo de 2011

Volver a leer


"Las estrategias y experiencias multiplicadoras son muchísimas, casi incontables porque de hecho cada lectura compartida es una experiencia en sí misma. Todas apuntan a desarrollar nuevos hábitos familiares y a recuperar en los profesores, docentes y bibliotecarios el placer, el amor y las ganas de leer, porque sólo si los maestros leen podremos llegar a ser una nación de lectores y podremos formar para las nuevas generaciones ciudadanos competentes, responsables, capaces de cuestionar todas las ideas y de brindar así a la sociedad ideas nuevas y mejores.
Y es que somos lo que hemos leído. La ausencia o escasez de lectura es un mismo camino seguro hacia la ignorancia y ésa es una condena individual gravísima, pero lo es más cuando deviene colectiva. La no lectura, desdichadamente, es un ejemplo que ha cundido impunemente en la Argentina, y en parte eso es lo que ha generado dirigencias autoritarias, ignorantes y frívolas.
Por eso sostengo que no hay peor violencia cultural que el proceso de embrutecimiento que se produce cuando no se lee. Una sociedad que no cuida a sus lectores, que no cuida sus libros y sus medios, que no guarda su memoria impresa y no alienta el desarrollo del pensamiento, es una sociedad culturalmente suicida. No sabrá jamás ejercer el control social que requiere una democracia adulta y seria. Que una persona no lea es una estupidez, un crimen que pagará el resto de su vida. Pero cuando es un país el que no lee, ese crimen lo paga con su historia, máxime si lo poco que lee es basura y si la basura es la regla en los grandes sistemas de difusión masivos".
Mempo Giardinelli.

viernes, 29 de abril de 2011

Sergio Makaroff, un autor tremendo

Sergio Makaroff es un compositor argentino que desde los años 80 reside en Barcelona. Allá lleva grabados cerca de media docena de discos, uno mejor que el otro. Quizás su tema más conocido sea “Tranqui tronqui”, del álbum “Un hombre feo”. Acá lo solían tocar “Los Tipitos”, cuando todavía se los podía ver en la peatonal de Gesell.
Abajo les dejo algunos videítos para que no se pierdan a este tremendo autor.

miércoles, 20 de abril de 2011

Semana Santa en la Costa

En Semana Santa nos vamos a tocar a la Costa.
El viernes en Hook (Villa Gesell) y el sábado a la tarde en un evento en Pinamar y a la noche en Sumai Huasi (Mar de las Pampas). Pronto les confirmamos los horarios.

martes, 19 de abril de 2011

Preguntas de un obrero ante un libro

Tebas, la de las Siete Puertas,
¿quién la construyó?
En los libros figuran los nombres de los reyes.
¿Arrastraron los reyes los grandes bloques de piedra?
Y Babilonia, destruida tantas veces,
¿quién la volvió a construir otras tantas?
¿En qué casas de la dorada Lima vivían
los obreros que la construyeron?
La noche en que fue terminada la Muralla china,
¿adónde fueron los albañiles?
Roma la Grande está llena de arcos de triunfo.
¿Quién los erigió?
¿Sobre quiénes triunfaron los Césares?
Bizancio, tan cantada, ¿tenía sólo palacios para sus habitantes?
Hasta en la fabulosa Atlántida,
la noche en que el mar se la tragaba,
los habitantes clamaban pidiendo ayuda a sus esclavos.
El joven Alejandro conquistó la India.
¿Él sólo?
César venció a los galos.
¿No llevaba consigo ni siquiera un cocinero?
Felipe II lloró al hundirse su flota.
¿No lloró nadie más?
Federico II ganó la Guerra de los Siete Años.
¿Quién la ganó además?
Una victoria en cada página.
¿Quién cocinaba los banquetes de la victoria?
Un gran hombre cada diez años.
¿Quién paga sus gastos?
Una pregunta para cada historia.
Bertolt Brecht.