lunes, 27 de junio de 2011

La arquitectura de la mentira


"Creo que para ser autobiográfico hay que agregar muchísima ficción. El riesgo que se corre es muy grande. Si quiero transmitir un dolor profundo y te cuento tal cual fueron los acontecimientos, no funciona. Pero si le agrego una escena de ficción, como la de la mujer de las uvas al principio de la novela, armo con esa arquitectura de la mentira una verdad que siento en el corazón y así es más probable que logre transmitir lo que quiero.
Creo que como escritor hay que ser honesto con lo que uno está escribiendo. Escribir sobre mi vida no significó decir la verdad sobre mi mamá, la verdad sobre mí, que por otro lado no existe. Uno va a contar una historia y tiene una sensación de esa historia. Si por temor o por cobardía no hace todo lo que tiene que hacer para intentar comunicar y compartir esa sensación, falla. Y la honestidad radica en que cada escena sea puesta por una necesidad de la historia. No hay ningún otro motivo para que algo esté ahí. A mí me interesa mucho rozar el lugar común como lugar estético. Tal vez sea más fácil esquivar esa mención a lo sentimental, pero yo prefiero arriesgar ese roce con el lugar común, con mi intuición como única herramienta y creo que a veces me sale".
Pablo Ramos

viernes, 24 de junio de 2011

Madres e hijos


Por Martín Kohan
“Primero mató a la madre, y ahora mató a las Madres.” La sonora declaración de prensa pertenece a Eduardo Duhalde y hace referencia, claro está, a Sergio Schoklender. No hay motivos para negar que la frase es bastante sugestiva. Por lo visto, a Duhalde se le dan realmente bien las frases con juegos de repetición verbal, del tipo de aquella otra que en su hora también pronunciara: “El que puso dólares va a recibir dólares”. No obstante esto que dijo hace días sobre Schoklender, al igual que aquello que dijo sobre los ahorros, es falso en un sentido cabal. Que Schoklender mató a su madre es cierto: está probado ante la Justicia. Pero no está probado ante la historia que haya matado a las Madres con su desfalco de maniobras turbias. Nuestro ex presidente interino se apuró con su veredicto, o expresó no tanto un parecer como una intuición o un temor o un deseo.
Más verdadera, en todo caso, creo yo, es la frase que entregó Elisa Carrió: “De qué vale decir que son de izquierda, si andan en Ferrari”. Admito que por lo común me cuesta congeniar con lo que dice Lilita: presiento que me iría mejor accediendo al remolino de sus trances místicos o creyendo en ese Dios que ella invoca y con el que cuenta. Como no me sucede jamás ni una cosa ni la otra, suelo quedarme bastante afuera de lo que formula, contemplando un tanto absorto su ferviente pasión por la verdad, un poco como si esa verdad fuese dicha en otro idioma, un idioma que no hablo. Sin embargo, en este caso, leí sus palabras en el diario, reponiendo sobre la impresión gráfica la gracia de sus entonaciones irónicas. Y me dejé persuadir por su cáustico argumento. En efecto, me dije: de qué vale decir que son de izquierda, si andan en Ferrari.
Por supuesto que no mezclo izquierda con franciscanismo, ni supongo que para sostener esta clase de ideología deba hacerse ningún voto de pobreza. Es tramposo presumir que hay en la izquierda algún gusto por la miseria o que el reparto de la nada forma parte de sus plataformas. Todo eso es erróneo en su concepto, si es que no un ejercicio de la mala fe; pero puede pese a eso decirse que es verdad que un cierto recelo respecto de lo suntuoso forma parte de su sensibilidad. El lujo como tal, lo grosero de la opulencia, lastima el temperamento de izquierda: es un sello de injusticia en un mundo de explotación que produce desigualdades intolerables.
Dicho con otras palabras, y de forma más concreta: cabe desconfiar por definición de quien tenga una Ferrari. Y si además de la Ferrari tiene un yate, y si además del yate tiene un avión, tanto más. Sin que importe demasiado dirimir si adquirió tales bienes sin visos de ilegalidad, lo que además no parece ser el caso, porque la legalidad en última instancia no aliviana la ilegitimidad del origen de toda gran riqueza. Es decir que incluso no habiendo dolo, y además parece haberlo habido, habría sido mejor desconfiar de un apoderado tan poderoso: no gustar de una persona que guarda Ferraris en su garage.
¿Desdibuja esta situación el lugar histórico de las Madres de Plaza de Mayo? Al contrario, lo fortalece. ¿Ha matado Schoklender a las Madres, como ha dicho Eduardo Duhalde? Al contrario, las vivifica. Porque las Madres no son madres sin más: son madres de hijos que faltan. Y faltan por las razones que ya sabemos: porque formaron parte de un proyecto de transformación social que fue vencido con los más feroces recursos, con los más terribles métodos. Las Madres son madres de esa falta y de esa ausencia. Y esa falta y esa ausencia tienen bastante que ver, a la vez, con que perdure la indignidad de un mundo con hambre y con miseria y también con Ferraris y con yates.
¿Pudo acaso suscitar Sergio Schoklender algún tipo de figuración imaginaria de una especie de filialidad restablecida? Según parece, así sucedió. Vino a paliar, como entenado, a la par de su hermano Pablo, la vacancia de los hijos que hace años se perdieron. Sus mentiras de estafador no dejan de subrayar una verdad de la historia política: que esos hijos no se perdieron por nada. Su Ferrari, su yate, su avión confirman por la negativa, desde su abyección fraudulenta, el sentido histórico de las Madres de Plaza de Mayo: lo que hizo que aquellas madres fuesen las Madres. Porque están fundadas sobre una falta, porque están fundadas sobre un lugar vacante. Y lo que vino a demostrar Sergio Schoklender, así fuese de manera miserable, es que el lugar de aquellos hijos, los que faltan, no se ocupa con facilidad, ni tampoco cuando uno quiere.

jueves, 23 de junio de 2011

Mañana en el programa de las Madres

Mañana, de 23 a 24 horas, en "La Clementina", van a pasar algún fragmento de lo que estuvimos haciendo el jueves pasado en el Ecunhi." La Clementina" es el ciclo de la Asocición Madres de Plaza de Mayo, que se emite por CN23, conducido por Hebe de Bonafini y Teresa Parodi. CN23 se puede sintonizar por disitintos sistemas de cable (canal 9 de Telecentro, canal 271 de DirecTV, canal 10 de Antina) y también por Internet en www.cn23.tv . A partir del lunes, además, el programa podrá verse por la televisión virtual de las Madres.

miércoles, 22 de junio de 2011

A 25 años del Diegol



El arte en 44 pasos y 12 toques

"Estoy seguro de que en una carrera sobre la misma distancia en una pista de atletismo Diego habría quedado detrás de los cinco ingleses a los que dejó en el camino". Fernando Signorini, el preparador físico que conoce mejor que nadie el cuerpo de Maradona, me dice también que los 10,6s que Diego empleó para recorrer 52 metros en su golazo a Inglaterra de México 1986 serían una afrenta en eventual competencia con Usain Bolt y su marca de 9,58s en los 100 metros. Por eso, Signorini se sorprende de que hoy, 25 años después, haya comentaristas que destaquen "la centelleante velocidad" de Diego en el que la FIFA premió como el mejor gol en la historia de los Mundiales.
Esos dos goles elevaron a Maradona al altar eterno. Y sirvieron para que el fútbol argentino 'matara' al padre
Para ganar, el atleta necesita correr a la mayor velocidad. El futbolista, en cambio, debe elegir la mejor velocidad de acuerdo a la jugada. Maradona, como apunta Signorini, supo cuándo aplicar el freno, el engaño y el manejo del tiempo y el espacio para dejar en el camino a medio equipo inglés. E hizo más. En sus 44 pasos y 12 toques de zurda al balón, también se hizo tiempo para ver que Jorge Valdano arrastraba la marca de Terry Fenwick. Y para recordar que, cinco años antes, su hermano El Turco, que entonces tenía apenas siete, lo había criticado porque en una jugada similar de 1981, en Wembley, no amagó y el remate salió afuera. "Todo lo que hacemos con los pies lo hemos de hacer antes con la cabeza", dijo alguna vez Alfredo Di Stéfano. Maradona, entonces, amagó hacia dentro y eligió correr hacia fuera para burlar el último obstáculo, el arquero Peter Shilton, y definir de zurda con el cuerpo inclinado para evitar una embestida final.
Cuando frena su odio por La Mano de Dios, que Maradona había marcado cuatro minutos antes, Inglaterra debate si el seleccionador, Bobby Robson, no debió haber destinado una marca individual a Diego para evitar ese segundo gol. Algunos invocan la nobleza de sus jugadores, que no apelaron a la falta. Pero Peter Reid, que tenía problemas en un tobillo, confesó que quiso desestabilizarlo empujándolo con un codo y llegó tarde. Diego lo superó con un giro a él y a Peter Beardsley. A partir de allí, corrió casi recto con la ventaja del zurdo que arranca por la derecha. Con el factor sorpresa de su lado. Los ingleses debían esperar su decisión. Terry Butcher, inevitable, se tragó el amago y el engaño lícito de la gambeta. Y Fenwick, amonestado desde los nueve minutos por una entrada brutal a Diego, temió la expulsión y se cruzó tarde. "¡Genio! ¡Genio! ¡Genio!", gritó desbordado el relator Víctor Hugo Morales. "La jugada de todos los tiempos... Barrilete cósmico... ¿De qué planeta viniste para dejar en el camino a tanto inglés?".
En las tribunas del estadio Azteca, 114.583 espectadores fueron testigos de la obra de arte. Y también de las peleas entre barras bravas argentinas y hooligans ingleses. La Guerra de Malvinas, de 1982, jugó su parte. En su filme Maradona by Kusturica, el cineasta serbio incluyó en la carrera del gol del siglo a Margaret Thatcher y al príncipe Carlos. Esos dos goles ante Inglaterra, dice el escritor Eduardo Sacheri, profesor de Historia, elevaron a Maradona al altar eterno. Pero sirvieron también para que el fútbol argentino matara a su padre. Solo muerto el padre, escribió Juan Sasturain, Argentina, que en el 78 había ganado en dictadura, celebró por fin en democracia. Lionel Messi hizo en 2007 un gol casi calcado, acaso más bonito, con túnel incluido y cinco décimas de segundo más lento. Pero fue ante el Getafe en la Copa del Rey. No alcanza para acercarse al mito.
Ezequiel Fernández Moores.

viernes, 17 de junio de 2011

Tocando en el "Ecunhi"



Acá, más fotos.

Hijos en Ciudad Emergente


Hasta el 20 de junio, en el Festival Ciudad Emergente, se van a repartir los discos que realizó el Gobierno de la Ciudad bajo la consigna "Música por la prevención". Nosotros tuvimos la suerte de formar parte del material con la canción "Puertas Cerradas". Los que estén interesados, se pueden acercar al stand del Espacio Escucha dentro del Centro Cultural Recoleta y llevarse su copia. La entrada es libre y gratuita.

jueves, 16 de junio de 2011

Una indemnización por la masacre de Floresta


Los tres muchachos miraban un canal de noticias que transmitía imágenes de un grupo de manifestantes golpeando a un policía. Eran las 4.10 de la madrugada del 29 de diciembre de 2001 y estaban en el maxikiosco de una estación de servicio en Floresta. “Está bien, es por lo que hicieron la semana pasada”, comentó Maximiliano Tasca, en alusión a la represión de la protesta del 19 y 20 que liquidó al gobierno de Fernando de la Rúa. En ese momento, el policía Juan de Dios Velaztiqui sacó su pistola, dijo “basta” y le disparó a quemarropa en la sien. A Cristian Gómez le tiró en la nuca y a Adrián Matassa en el estómago. Los tres murieron y el caso se conoció como la Masacre de Floresta. Ayer la Cámara en lo Civil y Comercial Federal dispuso que los familiares de Tasca y Gómez sean indemnizados por el Estado con más de 1.250.000 pesos. El crimen de Matassa se investiga en un expediente por separado.

El año pasado, la Justicia en primera instancia había dado orden de pagar una indemnización, pero ahora el tribunal aumentó los montos, por lo cual los Tasca cobrarán 678 mil pesos, mientras que los Gómez recibirán 575 mil. En la misma resolución se exime de responsabilidad a los dueños de la estación de servicio porque no tenían posibilidades de dar órdenes en ningún sentido al policía Velaztiqui, ya que “no se desempeñaba en relación de dependencia con la referida firma comercial, mientras que sí lo hacía con la Policía Federal”.

De hecho, el uniformado trabajaba como custodio, pero lo hacía en sus horas “adicionales”. “La diligencia exigible –sobre todo si se trata de una institución como la Policía Federal, por la índole de las funciones cumplidas por sus integrantes– no se agota en la elección de su personal, sino que también le incumbe el estricto control de su desempeño y conducta, aun más si se tiene en cuenta que a sus agentes les hace entrega de un arma, cosa indudablemente peligrosa”, enfatizaron los jueces de la Sala III de la Cámara en lo Civil y Comercial federal, Ricardo Recondo y Graciela Medina.

“La imagen de unos manifestantes agrediendo a un policía motivó dos comentarios de Gómez, ante lo cual Juan de Dios Velaztiqui –quien revestía como suboficial auxiliar de la Policía Federal y prestaba servicio de seguridad–, que también se hallaba en el interior del local, se levantó y con su arma reglamentaria dio muerte a Gómez y Tasca”, explicaron en el fallo. En aquel momento el policía fue trasladado a la comisaría 43ª y no pudo ser llevado a la alcaidía de Tribunales porque los vecinos mantuvieron sitiada la seccional durante toda la jornada.

Velaztiqui fue condenado el 10 de marzo de 2003 por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº13 a la pena de prisión perpetua por los tres asesinatos. En el juicio, que duró seis días, su defensa no puso en duda los hechos, sólo intentó plantear que el policía disparó por estar bajo un estado de shock emocional profundo, pero no pudo revertir la sentencia por “homicidio calificado por alevosía, reiterado en tres oportunidades”. Se había ganado el apodo de “el Trotador” por haber obligado a parte de la hinchada de Nueva Chicago a ir trotando hasta la comisaría 42ª, lo cual le había valido su primera causa judicial.
Vía Página/12.

lunes, 13 de junio de 2011

Hijos en el ciclo Escenario Rock

Tu nombre

Tu nombre es un fantasma
que habita en los rincones
de esta pieza vacía
estéril de ilusiones.

Tu nombre por las noches
tiene un sabor amargo
que hace sangrar mi boca
tan sólo con nombrarlo.

Tu nombre está poblado
de historias y recuerdos
que inundan mi memoria
con charcos de silencio.

Tu nombre es una grieta
que no puede cerrarse,
es una herida inmensa,
un duelo interminable.

Tu nombre lleva atado
el sueño que no ha sido,
las ganas de perderme
y el miedo de estar vivo.

domingo, 5 de junio de 2011

El niño que fui


"Quiero recuperar, saber, reinventar al niño que fui. Puede parecer una cosa un poco tonta: un señor que a su edad piensa en el niño que fue. Pero creo que el padre de esa persona es el niño que fui. Tenemos un padre biológico y una madre biológica, pero yo diría que el padre espiritual del hombre que soy es el niño que fui".
José Saramago.

miércoles, 1 de junio de 2011

Los 53 goles de Messi

En la temporada que acaba de terminar, Messi hizo 53 goles. Es, sin dudas, el mejor jugador del mundo y el máximo goleador de la Champions por tercer año consecutivo.
En el video que les dejo, se pueden ver las 53 joyitas que nos regaló sólo en este año. Esperemos que nos regale muchas más y si es con la celecte y blanca, mejor.