Nunca es tarde para "Hoy temprano"

Hace unos días terminé de leer “Hoy temprano”, un libro de Pedro Mairal que contiene doce cuentos de variada trama y registro. En el primero de ellos, que además da título al libro, narra las etapas de la vida de un hombre, desde la infancia hasta la adultez, a través de un viaje que nunca es el mismo, porque el tiempo y el progreso se encargan de modificarlo. En "La virginidad de Karina Durán", a un adolescente se le ocurre ofrecer el himen de su novia en una página de Internet, como represalia a la abstinencia a la que ella lo tiene sometido. En "El nieto del viejo Pintos", una mujer desesperada por quedar embarazada recurre a una curandera de pueblo para que la ayude a cumplir su deseo.
Si bien "Amor en Colonia" tiene un final fantástico, al estilo de Cortázar, el resto de los cuentos se apoyan en el costumbrismo y la monotonía de la vida cotidiana, lo que hace que el lector sienta y viva cada una de las historias como propia. Así transitan por sus relatos una gama de diversos personajes que "emprenden viajes de placer o de trabajo; buscan la aventura, el conocimiento, la paz o la felicidad", tal como lo indica el texto de la contratapa. Es en esa exaltación de lo cotidiano donde Mairal desarrolla el mismo talento que vieron Adolfo Bioy Casares, Augusto Roa Bastos y Guillermo Cabrera Infante cuando en 1998 le otorgaron el Premio Clarín de Novela por "Una noche con Sabrina Love", que incluso fue llevada al cine por Alejandro Agresti.
Aunque los cuentos mencionados se destacan tanto por su temática como por su estilo, los restantes que integran "Hoy temprano" demuestran ampliamente que Mairal, como diría Cortázar, "escribe cuentos, es decir, sistemas cerrados y no meros relatos en los que habitualmente no se pasa del recorte arbitrario de una situación, sin esa tensión que le da al cuento su valor de trampolín psíquico".
Por lo tanto, no es injusto incluir a Pedro Mairal dentro de la tradición de los mejores cuentistas argentinos; como tampoco afirmar que, sin dudas, es uno de los escritores más lúcidos y mejores dotados de su generación.