viernes, 25 de julio de 2014
Mis discos: El Atolón de Funafuti
Por Nando Varela
Pagliaro
En
una época en que los bares de la ciudad están tomados por bandas tributos y
falsos Sabinas, en que gran parte de las radios sólo programan grupos que son
clones de otros, con canciones que repiten siempre la misma fórmula, con la
misma cadencia de acordes, sorprende encontrar una propuesta distinta como la
de El Atolón de Funafuti.
Surgidos
a mediados de 2004, el sexteto que integran Tino Moroder, Marilina Calós, Lucas
Herrera, Nicolás Silva, Mariano Anselmi y Juan Corrao tomó su nombre de una
isla en Oceanía. Si bien en un comienzo la elección fue azarosa, hoy este
nombre los identifica cada día más. “Somos una isla musical. No miramos para
arriba, para abajo, ni para los costados: hacemos la nuestra, queremos crear un
lugar propio, no ocupar uno ya inventado.”, dice Moroder a Rolling Stone.
En
sus diez años de trayectoria editaron Pequeños
rostros en piezas (2007), El ritmo
del jardín (2010) y Palingenesia
(2013). Este último fue grabado en el estudio El Santito y tiene 16 canciones
que van del folk-rock americano a la clásica canción de rock con influencias de
grupos como Los Redondos o Héroes del Silencio. Los arreglos refinados de piano
y violín, los riffs y arpegios de guitarras y la voz potente y versátil de
Moroder hacen que Palingenesia sea su
trabajo más logrado.
El
invitado que responde nuestra entrega número doce de “Mis discos” es Tino
Moroder, guitarra y voz de El Atolón de Funafuti.
¿Cuál fue el primer
disco que compraste?
El
primer disco que compré fue un cassette, medio que lo compré pero también medio
que me lo regaló mi viejo. Era el disco de Manal en vivo en Obras Sanitarias.
Tremendo, me cambió la vida.
¿Cuál fue el último?
El
último fue un vinilo de Neil Young, After
the Gold Rush, un disco que claramente ya lo tenía escuchado, pero que lo
quería tener en mi colección.
¿Qué disco jamás
prestarías?
Tengo
varios que no prestaría, pero sí que invitaría a quien quisiera a escucharlos
en casa. Creo que Aeroblus en vinilo
es un tesoro invalorable que tengo y le tengo mucho cariño, al igual que
"Friends" de B.B King, que es un disco rarísimo.
¿Cuál fue el disco
que más veces prestaste o regalaste?
Creo
que cualquier disco de Pink Floyd. En especial Dark Side of the Moon, lo he regalado mucho durante los noventas.
¿Qué disco que antes
escuchabas, ahora ya no escucharías?
Cualquiera
de Los Redondos, los escuché mucho de pibe, hoy no los puedo escuchar más.
¿En qué lugar ponés
los discos que vos grabaste?
Los
discos que grabé siempre están a mano, desordenados, pero a mano.
¿Cuál fue el primer
disco que bajaste?
Me
parece que ni bien empezó lo del MP3 tardaba un siglo bajar una canción. Creo
que lo primero que bajé fue alguna canción de Paris Combo, una banda francesa
que escuchaba mucho por esa época.
¿Cuál fue el último?
El
último que bajé fue Old Sock de Eric
Clapton.
¿Cuál fue el disco
que más veces recomendaste o linkeaste?
Si
recomiendo discos, generalmente son discos viejos. Alguno de Billy Squier , Smiler de Rod Stewart, Gimme Back my Bullets de Lynyrd Skynyr, y
sobre todo, Tom Petty, cualquiera de sus discos.
¿Escuchás tus discos
en MP3?
Trato
de no escuchar mis discos en MP3. Prefiero hacerlo en el formato en que fueron
concebidos.
Publicada en Revista Paco, julio 2014.
jueves, 17 de julio de 2014
Mis discos: Científicos del Palo
Por Nando Varela
Pagliaro
Los
grupos de rock, como todos, encontraron en las redes sociales otra forma de
comunicarse. Además de las canciones y los shows en vivo, Facebook, Twitter y
Youtube son tres herramientas imprescindibles para que cualquier banda se
dirija a su público. En este contexto, pensar en el modo clandestino de
masividad de Los Redondos y su mítico “boca en boca” es algo cada vez más
anacrónico.
El
trío Científicos del Palo comprendió muy bien la importancia de las redes y desde
el Facebook de la banda, “Pepo” San Martín (guitarra y voz) comunica cada
mínimo acontecimiento con una dosis de humor corrosivo y originalidad que, al
menos entre los grupos de rock, es casi imposible de encontrar. Cuando invita a
sus seguidores a un show postea: “Hoy a la medianoche podrán vernos tocar en
Santana a cambio de dinero, porque así funciona el capitalismo. Después, si
tenés más dinero, podés comprarte un auto, un yate y una casa en un barrio
oligarca. Si luego de eso aún te resta dinero, podés acceder al selectísimo
club de los que poseen medios de transporte aéreos, que son un porcentaje
ínfimo respecto de las toneladas de salames clase media que anhelan obtener ese
tipo de vida pero no pueden, y trasladan esa frustración pidiendo el exterminio
de los pobres”. Para agradecerles y anunciar otra fecha, Pepo escribe: “Gracias
a todos los heroinómanos que asistieron en masa el fin de semana a Casa Rock.
Lágrimas... Luego de haber tocado ocho veces este año en ese recinto, descansaremos
un buen tiempo en nuestra ciudad. Ahora nos concentraremos en evitar el fracaso
en La Plata. Éste viernes estaremos en Shapó junto a Solene y Oesterheld.
Vamos, putos, vengan a paquear”.
Científicos
del Palo se formó en 1997 en la la ciudad de Mar del Plata y está integrado por
Pepo San Martín, Carlos Popete Andere y Sebastián Quintanilla. Llevan editados
cuatro discos: Ante todo, buenas tardes
(2004), Indigencia y distancia
(2007),Gorilophrenia (2010), y La histeria argentina (2013). En este
último trabajo, el trío marplatense entrega una obra conceptual que en clave de
rock recorre la historia del país, desde las invasiones inglesas y la
Revolución de Mayo hasta el año 2000.
Lejos
de las miradas tendenciosas que propusieron Sarmiento o Mitre para contar la
historia, Pepo San Martín eligió seguir la línea trazada por Osvaldo Bayer,
Norberto Galasso, Fermín Chávez, Arturo Jauretche y Scalabrini Ortiz.
“La
idea básica del disco fue evitar esa visión liberal, porteñista y
antiprovincial que me había fumado en mis tiernos años de educación primaria y
secundaria. Traté de mostrar una lectura que se dividiera por el concepto de
‘liberación o dependencia’, poniendo a los actores de nuestra historia de un
lado o del otro, tratando de no caer en la cuestión maniquea de si eran buenos
o malos. Quise que se notara que a mí me representan más los personajes que
tuvieron la intención de que no fuéramos una colonia, que intentaron defender
nuestra soberanía y que no estuvieron obsesionados porque seamos parte del
imperio a cualquier costo”, dice Pepo a Página 12.
La
edición de La histeria argentina,
además del CD, incluye un libro de 80 páginas con las letras de las canciones,
un prólogo doble a cargo de Hernán Brienza y Felipe Pigna, semblanzas de los
principales personajes de la historia argentina, una línea de tiempo con los hechos trascendentes desde 1810 hasta el presente y
originales ilustraciones de Fernando Gómez. Las 16 canciones del disco se
mueven entre el sonido tradicional de un power trío y un rock un poco más
progresivo, pasando por el funk, la balada a medio tempo, el hard rock y el pop
radiable de “Civilización o Barbarie”.
“Muchas veces nos hemos rebanado el cerebro
pensando por qué la cosa no avanza como uno imagina. Con 35 años, seguimos viajando
aplastados en una camioneta y pensábamos en qué estábamos fallando o dónde se
nos licuaba el éxito, tratando de ver qué hacían los demás. Hasta que nos dimos
cuenta de que le pifiábamos ahí: no había que hacer lo que hacían los demás.
Para eso ya están ellos y lo hacen mejor. Este disco va en contra de un montón
de cosas y abre otra posibilidad, como que la gente diga ‘éste es el pelotudo
que hizo el disco de historia’. Tiene ese bonus.”, dice Pepo en el Suplemento
No.
El
invitado que responde nuestra entrega número once de “Mis discos” es Pepo San
Martín, voz y guitarra de Científicos del Palo.
¿Cuál fue el primer
disco que compraste?
La era de la boludez, a medias con un
amigo.
¿Cuál fue el último?
By the way, de los Red Hot
Chili Peppers.
¿Qué disco jamás
prestarías?
Ojalá
me hubieran preguntado esto antes de prestar los discos indiscriminadamente...
He perdido los que más quería.
¿Cuál fue el disco
que más veces prestaste o regalaste?
Highway 61 revisited, de Bob Dylan.
¿Hay algunos discos
en tu discoteca de los que tengas vergüenza?
Ninguno.
Está el de Nicole Neumann que compré por dos pesos en una mesa de saldos de
Musimundo hace más de 15 años, pero es excelente, no me da vergüenza.
¿Qué disco que antes
escuchabas, ahora ya no escucharías?
Era
adicto a los Guns and Roses en mi primera adolescencia, ahora no los escucho,
pero tampoco los expulsaría de mi vida definitivamente.
¿En qué lugar ponés
los discos que vos grabaste?
En
las casas de los demás.
¿Cuál fue el primer
disco que bajaste?
Varios
de Brian Setzer.
¿Cuál fue el último?
El baile interior, de Bersuit.
¿Cuál fue el disco
que más veces recomendaste o linkeaste?
Like clockwork, de Queens of the
stone age.
¿Escuchás tus discos
en MP3?
Sólo
esucho MP3, los discos los usa mi hija para jugar, y creo que ya han perdido la
capacidad de reproducir música.
Publicada en Revista Paco, julio 2014.
viernes, 11 de julio de 2014
Hijos en Sólo para entendidos
La banda Hijos de Babel nos
cuenta un poco de su trayectoria, sus sueños, su filosofía y su último trabajo.
En la voz de Nando Varela Pagliaro, bajista de la banda, descubrí qué es Otros
mundos, quiénes son Hijos de Babel y entérate dónde podés escuchar su música.
¿Por qué la banda se
llama así?
El grupo nace a partir de un viaje que
hicimos con mi hermano Mauro a Barcelona. Ahí estuvimos cerca de dos años
tocando en muchísimos lugares, pero sobre todo en la calle. Si bien en ese
entonces todavía no nos llamábamos Hijos de Babel, las primeras canciones que
hicimos juntos, sí se gestaron luego de ese viaje. Vivir en esa ciudad rodeado
de millones de turistas hablando en distintas lenguas nos hizo pensar que
estábamos en medio de una Babel moderna, donde nadie se entendía con nadie. Por
eso a la hora de ponerle un nombre al grupo nos pareció que el tema de la
confusión y la mezcla de culturas tenían mucho que ver con el germen a partir
del cual nacimos. Hijos de Babel de alguna forma también es hijos de la duda o
la confusión. La duda, muchas veces, funciona como motor. Pienso, dudo, existo.
¿Desde cuándo tocan?
Arrancamos cerca del 2005 con un demo que se
llamó “Entre milagros y mil ogros”. Ese demo llegó a manos de Litto Nebbia y al
año siguiente, mediante su sello, editamos “Todo vuela”, nuestro primer disco.
En 2009 salió “Inalterable” y a fines de 2012 “Otros mundos”, el que por ahora
es nuestro último trabajo.
¿Qué estilo los define?
Nosotros nos definimos como un trío de Rock-
pop. Depende la ropa que necesite la canción, la vestimos de rock o de pop,
según la ocasión. Esto no quiere decir que si tenemos algún tema que tal vez no
cuadre dentro de estos dos géneros no lo vayamos a tocar. Nuestra búsqueda
tiene que ver con hacer canciones con melodías cada vez más lindas y letras que
intenten decir o contar algo. Si es rock, como diría Pappo, “que sea rock”,
pero si es pop, bossa nova o folclore, que sea lo que tenga que ser. Lo
importante es que nos guste y que quedemos
conformes con el resultado.
¿Cuáles son sus referentes?
Las influencias son muy variadas. Cada uno de
los tres tiene sus gustos particulares, pero compartimos muchísimos grupos y
artistas que nos marcaron desde que ni pensábamos en tener un grupo juntos y
hacer canciones. Esos lugares comunes son más que nada los clásicos: Beatles,
Queen, Pink Floyd, más todos los solistas que se desprenden de estas tremendas
bandas. También The Police, Sting, Radiohead,
R.E.M, Stevie Wonder, Muse, Nirvana, Foo
Fighters, Travis, Coldplay, Keane, Guns, Paralamas y tantos más. Yendo a
lo nacional por supuesto Charly, el Flaco, Nebbia, Fito y Cerati, pero también Aloras, Ella es
tan cargosa, Tipitos y Lisandro Aristimuño.
¿Qué es la música para
ustedes?
Es difícil no entrar en
lugares comunes y decirte que la música es lo que le da sentido a nuestros
días, pero realmente no son pocas las veces que se nos va el día pensando sólo
en eso. Además, a esta altura, es casi lo único que sabemos hacer de modo apasionado
y pese a que ya sabemos de antemano que Do, Mi y Sol tocados armónicamente van
a sonar bien en un punto nos sigue maravillando como cuando éramos pibes y nos
peleábamos por tocar el bombo en la clase de música de la escuela. Tenemos la
fortuna de saber lo que nos gusta, y cuando eso que nos gusta, para nosotros
suena bien, logramos irnos a dormir más contentos.
Cuéntennos un poco de Otros Mundos.
“Otros mundos” es nuestro último disco y está
compuesto de diez canciones inspiradas en textos de escritores argentinos
contemporáneos como Fabián Casas, Hernán
Casciari, Abelardo Castillo, Alejandro Dolina, Juan Forn, Mempo Giardinelli,
Pedro Mairal, Pablo Ramos, Guillermo Saccomanno y Reynaldo Sietecase. A su vez,
como bonus track complementario, los escritores se sumaron al proyecto leyendo
fragmentos de los textos que originaron las letras de las canciones que
escribimos nosotros.
¿Por qué hacer un CD sobre cuentos de otros?
La idea surge a partir de nuestra intención
de mezclar estos dos mundos que hacen que la vida, al menos para nosotros, sea
mucho más hermosa. Los mundos a los que me refiero, por supuesto, son el mundo
de la música y el de la literatura. Hacer un disco como este, nos pareció, por
un lado, que era una buena forma de conjugar nuestras dos pasiones y
unificarlas en un solo proyecto y por otro, quizás también el hecho de componer
a partir de otros textos nos servía para corrernos un poco de las temáticas que
veníamos abordando en las letras de nuestros discos anteriores. Lo curioso es
que al final terminamos escribiendo sobre el barrio, el paso del tiempo, el
desamor y la melancolía, al igual que en nuestras canciones anteriores.
¿Cómo eligieron los relatos?
A la hora de elegir a los
escritores, tratamos de que haya textos que puedan atrapar y gustar tanto a
aquellos que leen asiduamente como a los que no tienen a la lectura como un
hábito incorporado. Por eso hay textos más complejos y otros de lectura más simple,
más costumbristas. Para eso, principalmente nos basamos en nuestra propia experiencia
como lectores, sin dejar de ser fieles nunca a nuestros gustos personales. Otro
criterio que limitó mucho la elección fue el tema de que sean todos escritores
hombres, la idea en un futuro es hacer un volumen dos con canciones inspiradas
en textos de escritoras. No sabemos si para un próximo disco, pero sí quizás
para más adelante.
¿Cómo fue el trato con los autores?
En cuanto a la relación con
los autores, tuvimos la suerte de que todos se sumaran a nuestra propuesta.
Primero, leyendo un párrafo significativo del cuento en el cual nos inspiramos
para componer nuestras canciones y luego también les hicimos unas entrevistas
en formato video que se pueden ver en nuestro blog De hecho, algunos como
Reynaldo Sietecase, Pedro Mairal, Pablo Ramos y Hernán Casciari luego nos
ayudaron a difundir las canciones y el proyecto desde sus propios espacios. Lo
que nos asombró muchísimo fue la generosidad con la que todos se brindaron y
nos dieron su tiempo para formar parte de algo que no sabían muy bien cómo iba
a resultar. Sobre todo, escritores como Abelardo Castillo o Mempo Giardinelli, que
por una cuestión generacional uno los imagina lejos del rock. Sin embargo, nos
abrieron las puertas de sus casas y sus mundos; esos son gestos que nosotros
agradecemos y valoramos mucho.
¿Cuáles son sus próximos proyectos?
Ahora estamos empezando a
preparar los demos de las canciones nuevas. La etapa de composición y grabación
es una de las cosas que más disfrutamos. Por supuesto, que el vivo es lo que le
da sentido a todo. Este verano estuvimos tocando casi más de dos meses en la
Costa, así que ahora paramos un poco. Recién en abril volveremos a tocar. Somos
una banda que toca muchísimo. Nuestra política siempre fue tocar, tocar y
tocar. No conocemos otra forma mejor de mostrar lo que hacemos.
Un cantante.
Nacional: Gustavo Cerati
Internacional: Freddie Mercury
Un tema.
Cualquiera de Los Beatles.
Un sueño.
Seguir haciendo canciones
juntos. Ojalá cada vez mejores.
Mis Discos: Edu Schmidt
Por Nando Varela
Pagliaro
Después
de doce años y en el momento de mayor popularidad de la banda, Edu Schmidt,
decidió irse de la "fábrica de canciones" llamada Árbol. “Quería ser
coherente como artista: uno no puede fingir que la está pasando bien sobre un
escenario. No quería terminar siendo un infeliz con guita”, dijo a Clarín
cuándo le preguntaron por los motivos de su alejamiento. Desde esa decisión
hasta hoy pasaron más de siete años, y el cantante y multiinstrumentista sigue
tan activo y tan enérgico como cuando lideraba al grupo de Haedo. Esta nueva
etapa, que inició en 2006, lo encuentra sin manager y sin ninguna compañía que
lo respalde, pero con muchas más ganas de subirse a un escenario a mostrar sus
canciones. Ahora es él mismo, desde su computadora, el que gestiona los shows
en Capital y en el resto del país. “Soy el tipo que te va a cobrar más barato,
que te va a dar menos problemas. Yo soy re almacenero en eso. ¿Por qué? Porque
me interesa tocar. Me gusta, me sirve. Entonces, no se me va a caer ningún
anillo. No tengo ningún divismo”, se sincera Edu en Clarín. En esta aventura en
solitario, Edu recurrió a Internet para armar el seleccionado de músicos con el
que grabó su primer disco, El silencio es
salud (Independiente, 2009), y para
financiar la edición del segundo, Chocho!
(Independiente, 2013). Este último fue grabado en el Estudio del Abasto por
Álvaro Villagra y participaron reconocidos colegas como Ciro Pertusi (Jauría),
Pablo Romero (ex Árbol), Willy Piancioli (Los Tipitos), Pablo Vidal (El
Kuelgue), Gerardo Farez (Tremor), Martín Avati (La ciudad bajo la niebla) y
Marcelo "Balde" Spósito (ex Kapanga), quién además es co-autor junto
a Edu de casi todas las canciones del disco. El arte de tapa estuvo a cargo del
artista plástico Milo Lockett. Chocho!
contiene diez canciones con melodías simples de estribillos contagiosos,
arreglos de cuerdas, charangos y trompetas, que ya son su marca
registrada, letras sencillas que
destilan alegría, pero que también invitan a la reflexión. Lejos del punk más
rebelde de El silencio es salud, Edu
parece haberse amigado con su pasado cancionero y en este nuevo trabajo entrega
su disco más sutil.
Edu
Schmidt se presenta el viernes 18 de julio a las 23 hs. en Pompeya Pub Social (Castelar).
¿Cuál fue el primer
disco que compraste?
¿El
primer cassette querrás decir? No le digas a nadie, uno de Piero.
¿Cuál fue el último?
Ni me acuerdo.
¿Qué disco jamás prestarías?
Los
discos los regalé a todos, los tengo en MP3. Lo que trato de no prestar son los libros.
¿Cuál fue el disco que más veces prestaste o
regalaste?
El
primero de Manu Chao.
¿Qué disco que antes
escuchabas, ahora ya no escucharías?
El
de Piero.
¿En qué lugar ponés los discos que vos
grabaste?
No
sé ni dónde están.
¿Cuál fue el primer disco que bajaste?
Todos
los de los Beatles.
¿Cuál fue el último?
El
último de Vampire Weekend.
¿Cuál fue el disco
que más veces recomendaste o linkeaste?
El
primero de The Fratellis
.
¿Escuchás tus discos
en mp3?
Sí,
claro.
Publicada en Revista Paco, julio 2014.
martes, 8 de julio de 2014
Mis Discos: Utopians
Por Nando Varela
Pagliaro
En
2012, los integrantes de Utopians pasaron de no conseguir entradas para ir a
ver a Foo Fighters a compartir escenario con el ex baterista de Nirvana en
River. Para la banda que forman Bárbara Recanati, Gustavo Fiocchi, Mario
Romero y Larry Fus, el 2012 será recordado como el año de mayor crecimiento.
Fue a partir de la salida de Trastornados
(Pop Art, 2012) que sus canciones comenzaron a sonar en los rankings
radiales y televisivos; que fueron nombrados como la banda revelación por la
revista Rolling Stone; que giraron por todo el país; que su nombre fue incluido
en los grandes festivales de rock; que dieron ocho conciertos en Nueva York;
que llenaron dos Trastiendas; que se presentaron en la Costa ante 30 mil
personas y que fueron elegidos por Robert Smith para abrir el recital de The
Cure en River. En sus comienzos, editaron tres EP`s y un primer disco Inhuman (Independiente, 2007) cantados
en inglés. En Freak (Independiente,
2010) comenzaron a mezclar canciones
en inglés y en español y recién en Trastornados
dejaron de lado su anglomanía y compusieron todas las letras en nuestra
lengua.
Junto a Eruca Sativa, Connor Questa y Cirse,
Utopians forma parte de un tándem de bandas lideradas o integradas por mujeres.
Su cantante, Bárbara Recanati, sabe muy bien que es un momento especial para lo
femenino en la escena local, pero no le da demasiada importancia al asunto. “El
rock de Eruca, de Utopians y de Connor Questa lo podría hacer un hombre y sería
bueno igual. Lo que buscamos decir es que no somos la novedad porque somos
chicas, aportamos novedad desde las canciones y la música. Eso genera una
diferencia”, dijo Recanati a Télam. “La mujer tiene que encontrar otra carta de
presentación que no sea súper provocativa, estaría bueno que puedas tocar en
corpiño y no pase nada, pero seguimos siendo animales”, concluyó.
El
camino fue largo, pero ahora Utopians cuenta con diferentes posibilidades
técnicas y profesionales. “Nos acompaña un staff fijo que nos ayuda a ser
mejores músicos, tenemos equipos que podemos llevar a todos lados. Cosas que en
los primeros siete años no nos pasaron, no teníamos backline ni modo de
contratarlo”, se sincera Recanati en Télam. Esas posibilidades a las que sólo
llega un grupo exitoso, se ven sobre todo en Vándalo (Pop Art, 2014), su último trabajo. Luego de Trastornados, Utopians decidió ir a
buscar a los productores Eduardo Bergallo y Hernán Agrasar. En la primera
reunión les contaron que querían hacer un disco como los de antes: grabado en
vivo, con cinta y consola analógica.
Bergallo,
uno de los principales referentes en mastering y mezcla del país, les dijo que
el lugar indicado, para hacer lo que ellos querían, era el estudio Sonic Ranch
en Texas. En un principio, por cuestiones económicas, la idea les pareció
imposible, pero luego pidieron ayuda a los directivos de Adidas, marca que los
sponsorea hace años, y pudieron llevar la idea a cabo.
Una
vez en Sonic Ranch se dieron el lujo de grabar en una consola Neve como la que
motivó el documental Sound City de su admirado Dave Grohl. “La forma de
grabarlo marcó una diferencia significativa. Al trabajar de manera digital,
tenés la posibilidad de modificar algo que no te gustó o agregar efectos y
sonidos puntales. Al registrarlo en tomas completas, donde todos los
instrumentos fueron ejecutados simultáneamente, el privilegio lo tiene la
dinámica de toque sin la intervención de ninguna máquina”, detalló Fiocchi a
Rock.com.ar.
Vándalo vuelve a mostrarnos
a una cantante explosiva que desborda energía en cada una de las once canciones
del disco y a un grupo que continúa con la esencia de lo alternativo, del
garage, del post-punk neoyorquino de los ´80, del sonido new wave, de los
climas dark a lo The Cure y del rock crudo y guitarrero, pero con mayor madurez
que en sus trabajos anteriores.
El
martes 8 de julio a las 23 hs. Utopians se presenta en Santana Bar (Ramos
Mejía).
La
invitada que responde nuestra novena entrega de “Mis discos” es Bárbara
Recanati, voz y guitarra de la banda.
¿Cuál fue el primer
disco que compraste?
The joshua tree de U2.
¿Cuál fue el último?
Wonderful, glorious de Eels.
¿Qué disco jamás
prestarías?
Hey Joe de Patti Smith
(primer single, primera edición en vinilo de 1974).
¿Cuál fue el disco
que más veces prestaste o regalaste?
El
que más regalé fue Freak de Utopians
y el que más presté London Calling de The Clash.
¿Qué disco que antes
escuchabas, ahora ya no escucharías?
No
sé si no escucharía algo. Todavía conservo mis primeros discos de U2, Oasis,
Metállica que no escucho hace muchos años.
¿En qué lugar ponés los discos que vos
grabaste?
No
los tengo. Siempre que tengo una copia la termino regalando.
¿Cuál fue el primer disco que bajaste?
Disco
no me acuerdo. Me acuerdo que cuando salió Napster, estuve tres días bajando All allong the watchtower.
¿Cuál fue el último?
El
último de Bowie. Lo compré por iTunes. No bajo música. Me divierte mucho buscar
el disco o pedirlo prestado.
¿Cuál fue el disco
que más veces recomendaste o linkeaste?
Horses de Patti Smith .
¿Escuchás tus discos
en mp3?
Sí,
tengo muchos discos cargados al iTunes, pero los cargo en la misma calidad del
disco.
Publicada en Revista Paco, julio 2014.
jueves, 3 de julio de 2014
Mis discos: Andando Descalzo
Por Nando Varela
Pagliaro
Con casi veinte años de trayectoria, Andando Descalzo está conformado
por un grupo de amigos del barrio de Mataderos: Juani Rodríguez en voz, Federico
Salgado en bajo, Maximiliano Suppa en percusión, Carlos Quinteros en batería,
Pablo "Bocha" Otero en teclados y Ariel Paladino en guitarra. Su
primer show fue en el 95´ en un pub de Floresta ante unos cuarenta compañeros de la
escuela. Recién en 2001, ya con mucho escenario y varios demos, impulsados por
Goy de Karamelo
Santo, decidieron grabar su primer disco. Luego vendrían Mil destinos (2004), Diez años y vivo (2005), Hasta encontrar (2007), La quinta armonía (2010) y Ventanas (2013). Este último fue grabado
en los estudios Romaphonic (ex Circo Beat) y contó con la producción artística
de Alejandro Vázquez. Las once canciones incluidas en Ventanas están bastante lejos del ska y el reggae que hacía Andando
en las primeras épocas. Como en Hasta
encontrar, el hilo conductor ahora es el rock en formato canción. Muchas
veces con cierto aire de tango, con un tono más oscuro y más melancólico que el
fiestero que primaba en Mil destinos.
Sin detenerse en purismos, los estribillos bien marcados con pianos y guitarras
muy presentes, el cuidado de las letras y la voz sentida de Juani, hacen de Ventanas su disco más logrado.
"Andando dicen se hace el camino, descalzo es como yo lo quiero
andar", cantaban en "Judas Priest", uno de sus temas
legendarios. En esa frase, que es casi una declaración de principios, se puede
resumir el espíritu de una banda que desde hace casi veinte años sólo está
preocupada por hacer más y mejores discos. Eso, claro está, no es poco decir.
El
viernes 11 de julio a las 22 hs. Andando Descalzo se presenta junto a Pampa
Yakuza en XLR (San Miguel).
El invitado que responde nuestra octava entrega
de “Mis discos” es Juani Rodríguez, voz de Andando Descalzo.
¿Cuál fue el primer
disco que compraste?
El
primer disco que compré fue Corderos en
la noche de Las Pelotas. Recién había empezado el secundario y una amiga me
trajo Acariciando lo áspero de
Divididos, me partió la cabeza y ahí empecé a escuchar Sumo, conocí a Las
Pelotas por decantación y compré Corderos
en la noche, gran disco.
¿Cuál fue el último?
Random Access
Memories
de Daft Punk, un regalo para mi hijo y para mí también.
¿Qué disco jamás
prestarías?
No
tengo un disco que no prestaría, pero soy muy celoso de mis discos. No presto
más discos de los que pueda recordar y a medida que me los devuelven, voy
prestando. Si tengo un CD virgen en casa, te lo llevas en copia. Eso sí, tengo
a gente amiga y querida en la lista de "nunca le vuelvas a prestar un
disco".
¿Cuál fue el disco
que más veces prestaste o regalaste?
Tengo
muchísimos, la mayoría son de mi época adolescente. En esos tiempos, la forma
de pasarnos música era a través de un disco físico, mano en mano. Hoy en día
los discos que más regalo son los que va sacando Andando Descalzo.
¿Qué disco que antes
escuchabas, ahora ya no escucharías?
Si
me remito al significado de escuchar un disco, me parece que volvería a
escucharlos a todos. De hecho, los discos forman parte de momentos de mi vida y
volver a escuchar un disco significa revivir todo eso. Ya sea bueno o malo, es
lindo recordar.
¿En qué lugar ponés
los discos que vos grabaste?
No
tengo discos de Andando, porque las pocas veces que tengo, en cuestión de días
los termino regalando.
¿Cuál fue el primer
disco que bajaste?
La
discografía de Los Visitantes seguro, pero no me acuerdo cuándo.
¿Cuál fue el disco
que más veces recomendaste o linkeaste?
Imagino
que Flamingo de Brandon Flowers, ya que es un disco que me gusto mucho.
Últimamente AM de Arctic Monkeys.
¿Escuchás tus discos
en mp3?
Trato
de no escuchar mis discos.
Publicada en Revista Paco, julio 2014.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)