Por Nando Varela Pagliaro
El escritor polaco Witold Gombrowicz opinaba que era innecesario leer libros como el Quijote o la Divina Comedia; los clásicos según él se incorporan solos a nuestra cultura personal a través de otras lecturas menos espectaculares o tediosas. En la música, puede que suceda lo mismo y tal vez no sea imprescindible escuchar a esas bandas clásicas que uno supone que todo músico debería conocer. El grupo Las Diferencias es el ejemplo que viene a demostrar que la suposición es acertada. Al escuchar No termina más, el impactante debut discográfico del trío que conforman Andrés Robledo, Alejandro Navoa y Nicolás Heis, es inevitable no recordar a íconos del rock nacional como Pescado Rabioso, Color Humano o Manal. Sin embargo, los chicos de Las Diferencias afirman no haber escuchado a ninguna de estas tres bandas.”No las conocemos. Aguante el rock nacional, sabemos que tocamos gracias a esas bandas, pero la verdad es que no tenemos la menor idea. Hay cosas que nos terminaron gustando pero no salimos de ahí” dijo Robledo en una nota en Página/12.
El escritor polaco Witold Gombrowicz opinaba que era innecesario leer libros como el Quijote o la Divina Comedia; los clásicos según él se incorporan solos a nuestra cultura personal a través de otras lecturas menos espectaculares o tediosas. En la música, puede que suceda lo mismo y tal vez no sea imprescindible escuchar a esas bandas clásicas que uno supone que todo músico debería conocer. El grupo Las Diferencias es el ejemplo que viene a demostrar que la suposición es acertada. Al escuchar No termina más, el impactante debut discográfico del trío que conforman Andrés Robledo, Alejandro Navoa y Nicolás Heis, es inevitable no recordar a íconos del rock nacional como Pescado Rabioso, Color Humano o Manal. Sin embargo, los chicos de Las Diferencias afirman no haber escuchado a ninguna de estas tres bandas.”No las conocemos. Aguante el rock nacional, sabemos que tocamos gracias a esas bandas, pero la verdad es que no tenemos la menor idea. Hay cosas que nos terminaron gustando pero no salimos de ahí” dijo Robledo en una nota en Página/12.
Con
apenas 22 años, el trío del Oeste, ingresó al estudio El Attic bajo la mirada
atenta de Sergio CH (ex Natas). Allí, en sólo cuatro días, terminaron de darle
forma a las diez canciones que integran No
termina más (Oui Oui Records, 2013).
Para
hablar de su sonido, nadie mejor que ellos mismos: “para ser pop somos muy
duros, para ser stoners o metaleros somos demasiado blandos, para ser indies
somos complicados y cuando tocamos con bandas de blues nos sentimos un poco
desubicados”, dice Robledo en NaN a la hora de definir a Las Diferencias.En No termina más, los riffs hipnóticos y
distorsionados, los sonidos salvajes y valvulares a lo Jack White o Led
Zeppelin, los bajos machacantes y melodiosos, las baterías punzantes y
enérgicas, los originales yeites bluseros y los pasajes instrumentales que
generan una inquietante tensión se suman a la voz desgarrada de Robledo para
dar como resultado un disco efectivo que, sin alejarse de lo vintage, a la vez
suena fresco y con una fuerte identidad propia.
El
Sábado 28 de junio a las 21 hs. Las Diferencias abre la fecha de Pez en EQ Rock
(José C. Paz).
El
invitado que responde la sexta entrega de “Mis discos” es Andrés Robledo,
guitarra y voz de Las Diferencias.
¿Cuál fue el primer
disco que compraste?
Apenas
cumplí once años salió Lenny, que es un disco de Lenny Kravitz
de 2001. Tenía algo de dinero y padre me llevó a una disquería. No dudé ni un
segundo en llevármelo.
¿Cuál fue el último?
Tempest de Bob Dylan. Es un
disco de una persona con mucha experiencia. Lo poníamos en el auto para ir a
tocar.
¿Qué disco jamás
prestarías?
Los
que heredé de familia. Igualmente es bastante difícil para mí prestar cualquier
disco.
¿Cuál fue el disco
que más veces prestaste o regalaste?
Nunca
presté un disco más de una vez. Si me los prestan, trato de devolverlos lo más
rápido que puedo.
¿Hay algunos discos
en tu discoteca de los que tengas vergüenza?
Para
nada, hay discos que quizás alguien que escuche a Las Diferencias se
sorprendería pero ninguno me da vergüenza. No tengo vergüenza de las cosas que
quiero.
¿En qué lugar ponés
los discos que vos grabaste?
Donde
están todos los discos, como si fuera uno más. En estos días, en Twitter, vi
una foto de nuestro disco No termina más
junto a algunos de Oasis, re loco!
¿Cuál fue el primer
disco que bajaste?
No
me acuerdo, seguramente habré bajado la discografía de los Rolling Stones.
¿Cuál fue el último?
Leave Home de Ramones
¿Cuál fue el disco que
más veces recomendaste o linkeaste?
En
su momento Desire de Bob Dylan. Es más lo que me recomiendan que lo que yo
puedo recomendar.
¿ Hay algunos discos
en tu computadora de los que tengas vergüenza?
Hay
discos que me generaron mucha expectativa y finalmente nos las cubrieron. Están
en una carpeta de música todos juntos. A veces me llama la atención que todavía
no los haya eliminado.
¿Qué discos que antes
escuchabas, ahora ya no escucharías?
Creo
que a mí no me funciona mucho lo de escuchar un disco en el pasado y dejarlo.
No los dejo completamente, son puertas que se cierran pero sin llave. Hay
discos que dejo de escuchar y al tiempo los retomo. Puntualmente hace semanas
que estaba pensando en el primer disco de Dire Straits, a los 15 ó 16 ese disco
me encantaba y ahora lo escuché hace semanas y la verdad no me emocionó ni un
poco. Fui a Sultans of
Swing derecho y lo saqué.
¿Escuchás tus discos
en mp3?
Por
supuesto, cuando nací el CD ya existía. Soy de la generación de Internet y toda
la movida de la comunicación, así que todo eso es natural para mí. Me encantan los
discos de vinilo y esa época me emociona, pero soy consciente de que estamos en
el 2014 y que el mp3 es fácil, rápido y me parece perfecto. Después de todo me
importa el mensaje de la canción y la emoción de la música.
Publicada en Revista Paco, junio 2014.
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