Ayer me enteré que el domingo pasado se celebró por tercer año consecutivo el “Día Internacional del Perro Callejero”. La iniciativa partió a través de un grupo en Facebook, que tuvo su origen en Chile y luego se fue extendiendo a otros países. Según explica el impulsor de la idea, Ignacio Gac, la propuesta tiene como único fin que “todos salgan a las calles en forma independiente, con alimento para perros u otro tipo de comida, agua, abrigo o con lo que puedan y quieran. Lo ideal sería adoptar, buscarle un hogar a un perro o esterilizarlo. Así, además de ayudar de manera concreta, se crea conciencia sobre este problema en las personas. Todo para que los pobres perros tengan hogar, o al menos puedan comer algo, tener un poco de cariño y no morirse de hambre ni de frío”.
Actualmente, el sitio en la red social ya suma a más de 170 mil miembros y en lugares como Paraguay, Colombia, Costa Rica y Perú ya se hicieron actividades relacionadas con esta causa. En Argentina, por ahora sólo colaboraron desde Córdoba y Mar del Plata. Es cierto, un solo día no alcanza, pero al menos estos pequeños gestos siempre sirven para cambiar en algo la situación de tantos y tantos perros que viven en la calle. Modificando un poco aquella frase de la Lista de Schindler podríamos decir que “quien salva a un perro, salva a todos los perros”.
Abajo, les dejo una foto del que salvamos con Vale. Se llama Respon, Chocolate o Choco, responde a cualquiera de esos tres nombres. Vive con nosotros desde hace casi tres años y nos acompañó a recorrer todo el Norte y hasta cruzó a Bolivia y Uruguay. En casi su ex día se merecía un lugarcito en este blog.
No hay comentarios:
Publicar un comentario